Darse una oportunidad…

Que duras que podemos ser las mujeres cuando estamos rotas, duras en el sentido de ponernos un caparazón, de esos que recubre dorsalmente a las tortugas.

Nos dañan y nos volvemos duras, en ocaciones muy raras nos damos una oportunidad rápidamente, sin problemas, sin ponernos tantas trabas a nosotras mismas. ¿Por que hablo solo de nosotras? porque creo que en ese sentido somos muy diferentes al hombre. El hombre es fácil en ese sentido, si lo sufren lo sufren callados y con otra chica al lado que no los haga sentir solos, que no los haga acordarse de si extrañan o no, reemplazan, cuando claramente eso es casi imposible.

Por mi parte parece que algo en mi esta empecinado a que no pueda darme otra oportunidad. Hace cinco años estoy sola, hay mucha coincidencia con ese número de hecho en el amor. Pero no creo que sea para bien.

Cinco años de estar, de ir y venir, sin que nadie me vuele la cabeza para que yo me mande ciegamente al mundo del amor, quisiera que fuera tan fácil, me di cuenta que la vida esta llena de cosas por vivir, hace mucho estoy soltera y tuve una relación de cinco años antes de eso, ahí una coincidencia. La cual e vivido muchas cosas de las que me prive por esos años, no era la relación ideal, me impedía hacer ciertas cosas, por ende cuando nos peleamos me desacate, salí de fiesta, volví a tener relación con mis amigos, me juntaba más con mis amigas, tuve experiencias buenas, malas, pase por muchas cosas estos años de las cuales e tenido muchas lecciones, de vida, para razonar, para valorar, etc.

Me acostumbre a estar sola, ya nadie me jode, hago lo que quiero, dedico mis tiempos libres a lo que sea que quiera hacer, sin que nadie me diga si puedo o no hacerlo o sin estar pensando si a alguien le va a molestar o no. Mis relaciones con chicos estos últimos años a sido vernos, escribirnos, contarnos cosas, estar mutuamente para lo que sea, contarnos incluso experiencias con otras personas, todo sin joder, sin decir «no podes», todos dispuestos a mucho conmigo, pero yo estancada, en que ahora me asusta una relación, debo confesar que deje pasar oportunidades hermosas que por miedo no me animé, no me sentía lista y siempre pienso que no me voy a bancar una relación que ya no estoy para eso. Sin embargo después de años de pelear con mi caparazón, conocí un chico.

Nos conocimos de una forma poco inusual, yo ya lo había visto pero creía que no era de mi pueblo, él ni me registraba todavía. Un día como cualquier otro salí con uno de mis mejores amigos a tomar cerveza artesanal. Sentados hablando de nuestros problemas y alegrías, miro despistadamente para unas mesas afuera y el estaba ahí sentado tomando cerveza con otro chico, hablando, mientras sin disimular me miraba. Le dije a Gustavo «Amigo ese es el chico que me gusta del que te hable que no lo conozco, pero es hermoso» (yo toda embobada) a lo que me respondió «su hermana es amiga de su hermanita, cuando llegue a mi casa te digo el nombre de el». Me quede esperando pensé que se iba a olvidar, hasta que me llego el mensaje, «Amiga se llama Facundo Buttige» lo busque en Facebook, me aceptó la solicitud en segundos y me puso en messenger «Estabas con tu amigo, tu novio o tu amante jaja» Me quede loca, no pensé que iba a obtener un mensaje de el, así tan rápido, nos hablamos y nos juntamos esa misma noche, se comporto como todo un caballero. Me fui enamoradisima a mi casa, no daba más de la emoción, realmente es hermoso.

Pensé que como era tan divino y todo tan hermoso no iba a durar mucho, ya esta por ser un año y lo sigo viendo, quisiera decir que ya me saque la capa que tengo para no encariñarme, para no ser pesada, para no joderlo, pero no, la sigo manteniendo, a veces quiero animarme y decirle que realmente me hace sentir bien, que me quiero dar la oportunidad de volver a querer, de volver a enamorarme, pero si estoy en lo cierto el esta igual de roto que yo antes, con la caparazón, sin querer algo, Y pienso esto será para que me de cuenta que no me sirve de nada ser así, que quizás tengo que hacerlo entrar en razón o solo tengo que agarrar mis sentimientos y irme como siempre lo hago.

Darse una oportunidad, suena hermoso, motivador y es mas se siente deseable, pero que difícil es querer, querer a alguien cuando te rompieron, incluso ya con la herida totalmente cicatrizada sigue siendo difícil.

Ser valiente y querer, querer mucho es para gente privilegiada.

Incluso quizás este enamorándome de este chico, pero aún así por cobarde estoy decidiendo no hacerlo. Porque el miedo de que no sea reciproco va a poder en mi, quizás para siempre.

Vos valiente date la oportunidad.