La calle inolvidable

La calle inolvidable

Angelika Capote

07/06/2019

Esta es la parte que menos me agrada,

la parte en la que asimilo

que no transitaré más por esa calle,

tan tormentosa, inquietante, estremecedora,

impregnada de sensaciones encontradas.

La parte en que no volveré a tropezar mi mirada

con tus ojos color café profundo,

ni podré continuar memorizando

tus acendrados rasgos a la perfección,

como réplica inalterable en mis recuerdos.

Atrás quedaron esos atardeceres

teñidos de esperanza,

la sensación lejana de tu presencia

a pocos metros de distancia.

Ya no hay pretextos para caminar por esa acera,

repleta de sensaciones desconocidas,

que estremecía mi ser con tan sólo acercarme,

que iluminaba mi corazón,

cansado de habitar en las tinieblas.

Caminar por allí era como

tratar de subir al cielo por segundos

y sólo ser capaz de vislumbrarlo a lo lejos.

Era recordar que ya no sería igual,

que me habías olvidado,

por ironías y dictámenes de la vida,

la misma, que te excluyó de mi destino,

y te convirtió en algo pasajero,

en alguien destinado a cruzarse en mi camino

para hacerme entender

una lección de vida,

una enseñanza de estatura media,

cabello castaño oscuro y liso perfecto,

con ese tono único que al sol, se torna dorado,

piel clara pero bronceada,

como un paisaje de atardecer soñado,

mirada sutil y a la vez, profunda, atrayente;

sonrisa imperfecta pero cautivadora.

con defectos como cualquier ser humano,

muy alejado de lo ideal para muchos,

pero que ante mí personifican

la absoluta perfección.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS