Hoy es uno de esos días…

Hoy es uno de esos días en que la urgencia nos invade el alma.

Cuando todo los pendientes parecen emerger entre los pensamientos, para ocupar inevitablemente victoriosos los terrenos de la mente.
Hoy miramos para atrás; hoy la levedad de nuestros actos nos paraliza en bronca.

Hoy te digo te quiero convencido que no imaginarás cuanto.
Hoy te digo perdón, y doy mi vida por la respuesta deseada.
Hoy te digo gracias, sin esperar que entiendas hasta que grado se extiende esta gratitud.
Hoy te abrazaría, y no importaría que ese abrazo no termine nunca.
Hoy te miraría a los ojos, como tantas otras veces, pero distinto.
Hoy te diría lo que nunca dije, por no encontrar las palabras.
Hoy saldría corriendo a tu encuentro sin temer a los tropiezos.

Hoy es uno de esos días en que la urgencia nos invade el alma,
pero es tarde, la realidad comienza a anestesiar los pensamientos.
Vuelvo a la muerte disfrazada de vida.
Vuelvo al mundo, a la nociva verdad, a la levedad de mis actos.

Hoy es uno de esos días, en que la urgencia nos invade el alma.