El problema es que todo lo que escribo habla de ti

El problema de perder a alguien no está en el hecho mismo de perder. El problema es que caes de golpe a la realidad, y te das cuenta que nunca fueron tan cercanos, nunca fueron tan amigos, el hecho es que perder significa perder y no hay punto medio.

No saben cómo ni cuándo, pero ahora caminan por direcciones separadas, aunque se conocieron por tomar el mismo camino.

El problema se acentúa cuando una canción, por muy estúpida, simple, corta y fuera de lugar te recuerda algo, entonces pones la play list en repetir solo una, y crees que te hace sentir mejor, cantas a todo pulmón y bailas en un frenesí de sentimientos cuando estas sola en casa, gritas desahogandote, inventas historias en la que suena bien de fondo, hasta que te aburre,ya no sientes nada y terminas llorando a mares como siempre, porque el sentimiento está ahí y él ya no.

Lees poemas, escribes palabras tristes, vuelves a los viejos y malos hábitos, lees los clásicos que tenias en el fondo de tu librero, porque recuerdas que lo leiste un 12 de marzo cuando él hacía esto, o hacia lo otro, y por un momento sientes que no te hace falta, te repites una y otra vez que se fue pero te dejo lo mejor de él. Ahora notas costumbres que no tenías y manías que no conocías.

Quieres correr y alejarte de todos, porque no hay nadie que te acompañe como antaño lo hizo él. Ahora nadie te dice esas frases repetitivas que te subían el ánimo y hacían sonreír como estúpida, porque creías que era bonito que las escribiera para ti.

Tus amigas P y M te llaman, entonces te peinas y sales, sientes que afuera nada puede salir mal, pero el mundo te odia y entre risas cruzas la calle ignorando todo alrededor, notas a quien jamás has podido ignorar y recuerdas lo irónico de la situación, recuerdas que se fue con la excusa de sentirse ignorado y las náuseas te inundan, pierdes el color y sientes un golpe al corazón, porque ahí viene L.A, pero tu sigues caminando esperando que se detenga, te salude y te diga que también te ha extrañado, caminas esperando qué… Pero no, solo pasa que pasa a tu lado, sonríe ignorante de la situación, feliz de no ir a tu lado, acompañado y en la mejor versión de sí mismo en la que no hay espacio para ti.

Todo es como un ciclo tóxico de negación, depresión, superación y la inesperada y dolorosa recaída.

Ves que ha pasado una semana, pronto notas el mes y lo sigues extrañado en cada pequeña cosa que haces pero no le cuentas a nadie, lo guardas para ti porque es lo poco que te queda de él y no quieres compartirlo, no le cuentas a nadie que ya no te quiere, que ya no te habla y por supuesto ya no te lee.

… no le cuentas a nadie que te ha dejado con la palabra en la boca, y el sentimiento en el corazón.

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Hoy quiero decirte tantas cosas pero elijo contarte por ejemplo que estaré bien, que poco a poco dejo de pensarte, que ya no me haces falta. Pero te veo y sé que no he superado nada, porque las náuseas se acrecientan, y mis labios solo quieren pedirte que no me dejes y mi corazón quiere que me lleves contigo.

PD
8 años se cuentan rápido.