María y Luis. Parte 1

María una joven bella, estudiando, trabajando, humilde pero feliz. Tenía en ese entonces 18 años recién cumplidos cuando conoció a Luis un joven elegante, millonario y picarón todo lo opuesto de María.

Ellos iniciaron una relación la cual de un tiempo en adelante empezó a desvanecer donde hubo tanto amor.

—Y ella entonces le dijo; »necesito tiempo, necesito espacio, necesito alejarme… nada es como imagine, eres totalmente diferente a mis sueños, no eres nada que ver con el hombre que me imaginaba, con el que pensaba que seria para toda la vida… para el resto de mis días.»

—El le contestó; »tienes razón, soy una falsa, soy uno de tantos que no valen la pena, uno de los que no valoran de los que goza y disfruta la vida, de los que le valen los sentimientos de los demás. Entiéndeme tu, soy de los que no sabe ser »cursie» porque nunca lo aprendió, ni a demostrarle amor a nadie, de los que son detallista cuando les nace, pero de los que al final llegan a sentir algo extraño, eso extraño que solo alguien como tu lo puede despertar… el verdadero amor en silencio.»

— Ella le contesta; »Te entiendo, pero entiéndeme tu ami!! Para que seguir aquí si tu no haces nada para que me quede a tu lado? Para que dices que me quieres si cuando estas con tus amigos o en tu teléfono te olvidas de que existo… que solo te acuerdas de mi, de lo nuestro cuando me miras a los ojos y aveces dudo que pienses eso?… La verdad no se que hago aquí, que hago contigo.

El se queda pensando en silencio por dos minutos y ella decepcionada porque su corazón le dice que se quede pero las actitudes de el le dicen lo contrario, entre lagrimas y con la mirada baja le dice a su amado; -»Creo que estoy en el lugar equivocado, con la persona equivocada», entonces dio la espalda y con pasos lentos se marchó mientras el se quedaba pensando con la miraba baja que no la volvería a ver.

Ella mientras caminaba buscando otro lugar donde estar, con la cabeza baja buscaba una explicación y constantemente se preguntaba — ¿porqué?— ¿a donde se fueron todos esos años de amor? — ¿donde está ese hombre del que me enamore? — ¿donde queda mi lucha, todo lo que pasé para estar allí con el?.

En su mirada se reflejaba la decepción de María, como ella se entregó en cuerpo y alma a su amado Luis y a la hora de partir el no hizo nada para detenerla a pesar de que ella durante mucho tiempo venia comentándole a el lo que a ella le molestaba y mientras más ella le decía el más lo hacia y no era de el, sino de su instinto masculino, de que el si puede hacer las cosas como quiera y mientras ella solo tenía que hacerse la sumisa aunque todo estaba mal.

María era de esas mujeres que a pesar de que la vida le dio muchos golpes, que se encontrara con hombres machistas durante su camino por la vida, siempre era de las mujeres que no le reclamaba a los hombres, de las mujeres que no hacia nada para llamar la atención de su pareja, porque donde ella llamaba la atención era en su mirada y en su forma de expresarse que eran de una mujer segura de si misma y preparada; y eso era lo que aman los hombres de una mujer.

Luis si se enamoró de ella pero a su manera, esa manera que es difícil de entender porque durante su vida el nunca se entregó a una mujer, ni tampoco trato de dar lo mejor de el en una relación. El era el hombre que toda mujer deseaba tener, si… pero tenia ese defecto que era poco expresivo o más bien no expresaba sus sentimientos y María lo entendía pero lo que ella no entendía era, que como durante tantos años el no hacia ni la más mínima cosa para hacerla sentir bien. Ella entendió que no iba a ver manera de que el cambiara de que el fuera diferente a como el había sido todo ese tiempo.

Luis fue de los »playboy» que salía y estaba con la mujer que el quisiera, estaba con buenas, con malas, mas o menos, linduras, niñas ricas, en fin un sin numero de mujeres, pero de las que el entendía que nunca se iba a enamorar porque todas las mujeres eran así, que ninguna mujer le despertaría ese sentimiento de amor a el… pero llegó María a su vida a cambiarla y hacerle ver a el que todas las mujeres eran distintas. Y ese día que se marchó ella sabía que Luis la amaba como jamás había amado, pero ella quería más, ella quería que el se lo demostrara no que hiciera cosas para hacerla dudar de sus sentimientos.

María lo ama mucho más de lo que la razón entenderá, como a el jamás quizás lo amaron, porque María ama con el corazón, se entrega y dedica tiempo para su relación el cual hace que ella se sienta cada vez más enamorada y segura de sus sentimientos. Pero Luis no le correspondía a ese infinito amor que ella sentía por el porque su manera de amar es muy diferente a lo que ella quiere y eso no se puede cambiar.

Entonces Luis dice: – ¿Que he echo Dios mio para merecer esto, para sentirme así?. Quiero amarla como ella se lo merece, quiero sentir mas de lo que ella sienta por mi; pero no se porque no puedo amarla, no puedo sentir ese sentimiento lindo por ella.

María vuelve y decide seguir su vida al lado de Luis, a pesar de todas las barbaridades que le ha descubierto, porque lo ama; porque María ama a Luis como desde el día que lo vio por primera vez, desde que sintió ese sentimiento único y real por el. A pesar de todo María es valiente porque lo ama incondicionalmente a pesar de todo y de todos sin importar distancias y dificultades, sin importar todo lo que ha pasado.