Te busqué…

Te busqué…

Teté Nz

10/04/2019

Te busqué sabiendo que no te encontraría.

Te busqué con miedo, con esperanza. Sin ella.

Te busqué entre las carreteras, entre los pueblos, entre mis recuerdos.

Estaba agotada, habían pasado ya algunos días y la desesperación aumentaba, podía verlo en los ojos de mi padre. Él se mantenía fuerte, cada noche aseguraba, con las palabras mas amorosas que le hubiera escuchado antes, que te encontraríamos.

Planeaba, dirigía, guardaba una reserva de calma que no conocía.

Al paso de los dias eramos más, la búsqueda era incesante. Llegaba la noche y la esperanza se iba con ese día.

El frio quemaba, me dolía pensar que solo esa camisa blanca estuviera cubriendote, habia una pequeñísima parte de mi que pensaba en la posibilidad…

Tierra y aire. Te busqué. Te buscamos.

Rodaba en la pista a Guerrero. Sonó el celular. Me pidió orillarme. Sabía que todo había acabado.

Mi papá con la voz entrecortada solo alcanzó a decir «si es la avioneta». Me bajé del auto en ese momento, grité, le pegué, maldije y lloré como quien pierde una parte de sí mismo.

Abracé a mi compañera de guerra, que aunque visiblemente dolida se mantuvo fuerte, sosteniendome.

Cambiamos el destino. Iguala.

Se me acabó la prudencia y dejó de importarme la educación. El Servicio Médico Forense es en definitiva el lugar mas desolador que puede existir.

Me di cuenta de que todo lo que creía importante estaba realmente muy lejos de serlo. Habia sido muy ignorante.

Los detalles los conoces, estoy segura que esa noche en Iguala sí estabamos los tres…

Era momento de dar la noticia mas difícil. Llamé a mi madre.

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