La carrera de las nubes
Durante muchos años las nubes han tenido guardianes, quienes se encargan de moldear sus formas, para darles belleza y dirigirlas por el cielo… dichos guardianes son competitivos, y poderosos pues gracias a las nubes ellos tienen poderes increíbles: pueden controlar la lluvia, los relámpagos, el viento, e incluso algunos rayos de sol. Cada diez años un volcán lanza hacia el cielo una roca; esta roca permanece en el cielo hasta que alguien la logra alcanzar. quien lo logre tendrá un solo deseo y la roca inmediatamente lo cumplirá y volverá al volcán. Pero: ¿que es lo que un Guardián de nubes podría desear?: ellos desean la vida desean vivir, amar, llorar, morir. cada vez que el volcán lanza aquella roca, los guardianes organizan una carrera en la que compiten para que la roca les cumpla su único deseo. durante la carrera se enfrentan a obstáculos que sus mismos oponentes crean; tienen que esquivar relámpagos, vientos feroces, granizos gigantescos. La fuerza de estos guardianes no tiene límites. Para comenzar la carrera el guardián más longevo debe lanzar un rayo azul para dar inicio a la competencia… este año competirán guardianes imponentes, a simple vista parece que el más grande y musculosos ganara, sin embargó a sorpresa de todos; una guardiana pequeña competirá… al verla todos sueltan una carcajada: – miren eso ella no podrá ganarle a aquel musculoso (grito un guardián entre risas burlonas)… – ella es tan capaz como todos los demás (respondió una guardiana). La pequeña de la que todos se burlaban, ignoro todas las burlas tomó su posición… y cuando el Rayo resonó por todo el cielo comenzaron a correr. los competidores saltaban de nube en nube atacaban con relámpagos a cualquiera que les estorbara, creaban vientos feroces que lanzaban a los oponentes atacados al inicio de la pista. La carrera seguía. ya con muy pocos guardianes A unos cuantos metros de la roca corrían veloces tres guardianes, para sorpresa de todos uno de esos tres era la pequeña de la que todos se habían burlado. La pequeña ya veía la roca flotando casi frente a ella, cuando de pronto: un guardián decidió hacer uso una vez más de sus poderes y alzó frente a la pequeña una gigantesca nube, la cual ella atravesó dando un valiente saltó. valiéndose del viento que ella misma crearía lanzo a aquel guardián que la atacó, y Corrió con coraje dando un grito de guerra salto y tomó entre sus pequeñas manos la roca. ella ganó la carrera, al tomar la roca, pidió su deseó… los guardianes se quedaron sorprendidos y en silencio, apenas y se escuchaban unos cuantos susurros entre los guardianes que observaban. De pronto el guardián mas longevo soltó una cargada seguida de aplausos dirigidos hacia la pequeña triunfadora, todos los guardianes sorprendidos se levantaron y ovacionaron a la pequeña de la que se habían burlado. Ella nació y recordó los primeros años de vida aquella difícil carrera. un día olvido quien fue sobre las nubes pero siempre supo que ella era especial pues su vínculo perdurará. siempre será parte de los guardianes de las nubes.
Aves de la Luna
Hermosas aves han ayudado ala Luna a vestir y adornar el hermoso cielo nocturno. estas aves se dedican a esparcir las estrellas por todo lo ancho del cielo. vuelan y juegan con las ballenas que se aventuran a salir del mar de noche. vuelan y con sus magníficas alas van decorando la obscuridad. en ocasiones le llegaban rumores ala Luna sobre sus magníficos ayudantes: se decía que alguna de sus aves también ayudaba a los enamorados y entregaba las cartas de amor al anochecer. la Luna solo escuchaba y reía. una noche la Luna observo al búho uno de sus mas fieles ayudantes y le preguntó si era feliz: -si lo soy, me he enamorado de las estrellas. (Respondió el búho). pero la Luna noto en su voz y en sus plumas la presencia de la vejez, lo notaba cansado, y más lento. A si que la Luna decidió darle su última misión; tenía que elegir a un búho más joven para que le ayudará con las estrellas, el búho aceptó y comenzó a buscar. paso mucho tiempo, pero un buen día encontró a su ayudante perfecto; sus alas eran mucho más grandes, era más veloz, y sus blancas alas se asemejaban en color a los blancos rayos de la Luna. Aquel no era un búho, era una lechuza gigante, se encontraba sola en el bosque. El anciano búho se aproximó a la hermosa ave lo más que pudo.-estarás a salvo con nosotros, nadie te atacara (dijo el búho). – solo cuidarás de las estrellas y adornadas con ellas el cielo al anochecer. -está bien, iré con usted. (Dijo el joven). Fue un buen alumno logro aprender rápido y demostró ser veloz al volar. Rápidamente se logro ganar la confianza de la Luna. Una noche mientras el gigante esparcida las estrellas se dio cuenta de que en su ala derecha tenía una estrella encarnada, pero no le dolía, al contrario le fascinaba, se sentía, hermoso, y si lo era, era gigante, brillante y ,hermoso. -pronto formaras parte de las mágicas luces del cielo. (dijo la Luna casi susurrando). La hermosa lechuza levantó sus alas y se sacudió suavemente se le cayeron unas cuantas plumas sin embargó en su lugar salían estrellas brillantes de colores espectaculares. cada noche cuando emprendía el vuelo si algunos afortunados la veían, a lo lejos tenían la dicha de pedirle un favor; la lechuza se encargaba de enviar mensajes a personas que estaban lejos de algún ser querido. Una noche el búho viejo y la Luna, vieron a aquella lechuza, jugar con las nubes, volaba en círculos, volaba y se dejaba caer, y se dieron cuenta de que sus alas, más que brillo de estrellas, parecían tener fuego, sus ojos azul claro se tornaron obscuros con una luz majestuosa. aquella joven lechuza era realmente feliz a lado de la luna. Sin embargo un día se enamoró, encontró en un bosque a otra lechuza oculta y asustada , los hombres la cazaban pues creían que era una bruja, la lechuza habló con la Luna, para poder rescatarla, pero la Luna se lo negó.- bajo tu cuidado, están las estrellas de mis ayudantes pasados. (Dijo la Luna preocupada). -son las estrellas más poderosas que ahí en el cielo, que pasa si tu amiga se equivoca Y decide robar para si misma una estrella. el problema es; que las estrellas de los guardianes pasados, reflejan la pureza del ser que las protege, si el guardián es bueno, brillara por lo contrario si el guardián decide robar alguna estrella; las estrellas tornaran su brillo en obscuridad y el guardián no brillara más si esto pasa ya no podrá permanecer en el cielo. El joven guardián no podía convencer a la Luna de aceptar a aquella lechuza. la lechuza de las estrellas vigilaba ala pobre lechuza indefensa desde lo alto del cielo. una noche los hombres encontraron ala lechuza y prendieron fuego sobre de ella, la lechuza de las estrellas bajo veloz en su auxilio. una explosión de colores iluminó la obscuridad del bosque. todos creyeron que las lechuzas habían muerto juntas, incineradas por la ignorancia. los hombres contaron orgullosos la noche en que quemaron a dos brujas. la Luna y el búho contaban con tristeza que perdieron al mas fiel guardián de las estrellas o al menos eso decían a quienes preguntaban. nadie se imagino que en realidad se encontraban ocultos entre las nubeDurante años hermosas aves han ayudado ala Luna a vestir y adornar el hermoso cielo nocturno. estas aves se dedican a esparcir las estrellas por todo lo ancho del cielo. vuelan y juegan con las ballenas que se aventuran a salir del mar de noche. vuelan y con sus magníficas alas van decorando la obscuridad. en ocasiones le llegaban rumores ala Luna sobre sus magníficos ayudantes: se decía que alguna de sus aves también ayudaba a los enamorados y entregaba las cartas de amor al anochecer. la Luna solo escuchaba y reía. una noche la Luna observo al búho uno de sus mas fieles ayudantes y le preguntó si era feliz: -si lo soy, me he enamorado de las estrellas. (Respondió el búho). pero la Luna noto en su voz y en sus plumas la presencia de la vejez, lo notaba cansado, y más lento. A si que la Luna decidió darle su última misión; tenía que elegir a un búho más joven para que le ayudará con las estrellas, el búho aceptó y comenzó a buscar. paso mucho tiempo, pero un buen día encontró a su ayudante perfecto; sus alas eran mucho más grandes, era más veloz, y sus blancas alas se asemejaban en color a los blancos rayos de la Luna. Aquel no era un búho, era una lechuza gigante, se encontraba sola en el bosque. El anciano búho se aproximó a la hermosa ave lo más que pudo.-estarás a salvo con nosotros, nadie te atacara (dijo el búho). – solo cuidarás de las estrellas y adornadas con ellas el cielo al anochecer. -está bien, iré con usted. (Dijo el joven). Fue un buen alumno logro aprender rápido y demostró ser veloz al volar. Rápidamente se logro ganar la confianza de la Luna. Una noche mientras el gigante esparcida las estrellas se dio cuenta de que en su ala derecha tenía una estrella encarnada, pero no le dolía, al contrario le fascinaba, se sentía, hermoso, y si lo era, era gigante, brillante y ,hermoso. -pronto formaras parte de las mágicas luces del cielo. (dijo la Luna casi susurrando). La hermosa lechuza levantó sus alas y se sacudió suavemente se le cayeron unas cuantas plumas sin embargó en su lugar salían estrellas brillantes de colores espectaculares. cada noche cuando emprendía el vuelo si algunos afortunados la veían, a lo lejos tenían la dicha de pedirle un favor; la lechuza se encargaba de enviar mensajes a personas que estaban lejos de algún ser querido. Una noche el búho viejo y la Luna, vieron a aquella lechuza, jugar con las nubes, volaba en círculos, volaba y se dejaba caer, y se dieron cuenta de que sus alas, más que brillo de estrellas, parecían tener fuego, sus ojos azul claro se tornaron obscuros con una luz majestuosa. aquella joven lechuza era realmente feliz a lado de la luna. Sin embargo un día se enamoró, encontró en un bosque a otra lechuza oculta y asustada , los hombres la cazaban pues creían que era una bruja, la lechuza habló con la Luna, para poder rescatarla, pero la Luna se lo negó.- bajo tu cuidado, están las estrellas de mis ayudantes pasados. (Dijo la Luna preocupada). -son las estrellas más poderosas que ahí en el cielo, que pasa si tu amiga se equivoca Y decide robar para si misma una estrella. el problema es; que las estrellas de los guardianes pasados, reflejan la pureza del ser que las protege, si el guardián es bueno, brillara por lo contrario si el guardián decide robar alguna estrella; las estrellas tornaran su brillo en obscuridad y el guardián no brillara más si esto pasa ya no podrá permanecer en el cielo. El joven guardián no podía convencer a la Luna de aceptar a aquella lechuza. la lechuza de las estrellas vigilaba ala pobre lechuza indefensa desde lo alto del cielo. una noche los hombres encontraron ala lechuza y prendieron fuego sobre de ella, la lechuza de las estrellas bajo veloz en su auxilio. una explosión de colores iluminó la obscuridad del bosque. todos creyeron que las lechuzas habían muerto juntas, incineradas por la ignorancia. los hombres contaron orgullosos la noche en que quemaron a dos brujas. la Luna y el búho contaban con tristeza que perdieron al mas fiel guardián de las estrellas o al menos eso decían a quienes preguntaban. nadie se imagino que en realidad se encontraban ocultos entre las nubes en lo alto del cielo, cuidando a las estrellas, la Luna aceptó a ala nueva lechuza confiando en que era buena y pura. s en lo alto del cielo, cuidando a las estrellas, la Luna aceptó a ala nueva lechuza confiando en que era buena y pura.
sueño sér nubes
solo en sueños puedes tener lo que deseas entre los dedos. en un mundo donde los sueños pierden su valor; un niño que se siente sólo, sueña con ser vapor, sueña con ser brisa, sueña con ser nubes. en una casa mal construida vive un pequeño niño enamorado de la vida y de la fantasía. pasa la mayor parte de las tardes asomado en la ventana soñando con volar; se imagina volando vestido de blanco jugueteando con las nubes, se imagina usando las estrellas como decoración en su ropa y zapatos… la tarde que vio por primera vez el mar; se imagino montando un caballo echo de la espuma de las olas. es un niño muy pequeño con una imaginación infinita, ve el mundo con algo de fantasía. Una noche se quedó dormido con la ventana abierta; sintiendo el frío viento nocturno tuvó el sueño de siempre: un hombre echo de nubes le pide permiso de formar parte de su vida:-siempre he querido saber que se siente soñar, te he observado desde mi nube y deseo sentir lo que tu sientes. El sueño hasta esa noche había terminado de la misma manera el niño despierta sin dar respuesta al extraño hombre. La siguiente noche fue distinta: escuchaba el canto de un grillo muy cerca de su oreja pero esta vez no despertó observo al hombre con atención y el sueño de siempre se hizo presenté. Pero fue el niño el primero en hablar esta vez:-siempre he querido ser parte del bello paisaje que existe en el cielo. -entiendo. (Dijo el hombre ) Diciendo esto y sin hacer preguntas, el niño le dio la mano al extraño hombre y despertó. Sus días siguieron como siempre, el creyó que tal vez solo había sido un sueño fantástico más, pero un día una extraña Mancha de tono claro apareció en su mano y poco tiempo después aparecieron más manchas en sus brazos, pecho y pies. Cada Mancha tenía formas distintas y las observaba al tiempo que aparecían. una noche volvió a soñar con el hombre de nubes: -¿cuando dejaran de aparecer estas manchas?. ( pregunto el niño haciendo muecas). – cada una de tus manchas es una nube. Dejaran de aparecer cuando ambos cumplamos el deseo pedido. Yo ganó vivir experiencias únicas en la mente de un soñador. ver, oir, sentir, vivir, como un niño. Tu tendrás a cambio mi fuerza y alguna virtud que se me dio como guardián. Pero debemos tener cuidado si das un mal usó de mis dones me devolverán a las nubes y tu te convertiras en vapor. -dices que dejaran de aparecer cuando ambos cumplamos el deseo pedido ¿cierto?. -si es cierto. – yo deseé formar parte del paisaje del cielo. Tus dones me darán eso?. – niño tu eres el cielo cada Mancha es una nube… Tu eres ahora el cielo. – quiero ser nubes así como tu… Quiero poder tocar las estrellas… (El hombre lo interrumpió molestó) – ni siquiera yo puedo tocar las estrellas pues ahí guardianes que las protegen. Y un guardian de estrellas puede dañar horriblemente a un guardián de nubes si así lo desea. – ese fue mi deseo. Y si no lo respetaras no aceptó el trató. (Dijo el pequeño muy serio) – está bien serás parte del paisaje todos los días. Diciendo ésto el hombre puso sus manos sobre la cabeza del pequeño niño. despertó ala mañana siguiente muy animado salió de su casa dispuesto a jugar como siempre. Pero había algo distinto aquel día; el viento se sentía diferente se oía diferente. Escuchaba un susurro suave que le decia: – cierra los ojos. El niño obedeció cerro los ojos y sintió como sus pies se alegaban del suelo poco a poco. Volvió a escuchar el suave susurro: -eres parte de las nubes ahora. El niño abrió los ojos y vio que Estaba parado sobre una enorme nube blanca. No pudo hacer más que gritar de la emoción, miro a su alrededor y no había nada ni nadie más que el, miro hacia arriba y vio las estrellas. Su ropa era de color blanco como la nube, sus pies estaban Descalzos y su cabello despeinado por el viento cuando al fin decidió bajar el viento le susurro:- no le muestres a nadie lo que puedes hacer. El niño comenzó a correr de vuelta a casa. Mientras corría pudo notar que el viento le obedecía, saltó sobre un charco y el agua foto frente a e el cómo si esperará que el niño le mostrará alguna dirección en la cual caer, el niño corrió más rápido ahora asustado y sin aliento.
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