Como voy a odiarte mujer

No podría ser capaz de hablar mal de alguien que he amado mucho sobre todo porque los dos compartimos muchos años juntos. Guardo ante ella toda mi consideración y mi estima, aunque ni yo misma me lo creo; creo que no hay rencor sino un sentimiento de recelo.

No hay víctimas ni victimarios, no fuimos los mejores novios del mundo; fuimos consecuencia de nuestras decisiones. No me arrepiento de estos meses agarrados de sus manos. A pesar de las altas, bajas y muy bajas en nuestro camino viví cosas que no había vivido, cosas preciosas y maravillosas. Pero con el tiempo sino le pones todas las ganas todo se desgasta.
No nos echemos las culpas de nuestros errores, alegrémonos de habernos conocido; sé que algo aprendimos el uno del otro, sé que de todo lo malo se saca algo bueno. A su lado reí, salte, ame, abrace, corrí pero también sufrí como lo que conlleva el amor. Pero el sufrimiento tiene que ser menos que la felicidad. Es así que con mucha dignidad es mejor cerrar las etapas.
Aprendí que la vida continúa, aprendí que ante un grave error puede existir el perdón pero no la reconciliación, aprendí que quien te ama no te hará daño, aprendí que una relación conlleva tiempo esfuerzo y sacrificio. Aprendí que uno puede ser feliz en la abundancia como en la escasez; que se puede vivir del amor pero no del recuerdo. Aprendí que todos somos más fuertes que nuestros propios problemas.
Deseo de todo corazón que todas las decisiones que esté tomando sean concientes porque todo… absolutamente todo en esta vida es cuestión de tiempo. Y el tiempo paga las facturas las altas y las bajas. Espero no le hagan infeliz. Espero que los buenos amigos la rodeen; no los amigos de diversión solo aquellos que se cuentan con los dedos, espero saque fuerzas del infinito y salga adelante. Espero pase el tiempo sobre ella y la haga una gran mujer.
Solo el tiempo lo dirá.

Gracias Dios por esta enorme lección.