Hoy me decidí borrarme,
desperté y borré mis heridas y mis errores para entregarme como un lienzo desnudo a ti, dispuesto a ser llenado con una nueva historia.
Me borré y estoy entregándote el pincel.
Me paro frente a ti, estoy viéndote; desnuda de alma, limpia, vacía. Quisiera que tú también me veas vacío;
vacío de memorias, vacío de pensamientos.
Quiero que seamos tú y yo en este instante,
nuestras esencias.
Que no haya nada detrás de nosotros, que no arrastremos demonios.
Deseo que inhalemos la versión más pura de nosotros. Esa parte que incluye nuestros secretos, esa parte en la que guardamos lo que callamos en los silencios largos.
Me entrego sin miedo porque también lo he borrado para ti. Junto con mis inseguridades y mi incapacidad de amar.
Borré los rezagos de las historias viejas que aún quedaban sobre mí, borré algunos tragos de alcohol y cigarrillos, borré mis inseguridades, mi desconfianza, y finalmente borré la gruesa capa en la que encerré a mi alma,
prisionera del miedo desde hace mucho tiempo.
Te ofrezco mi alma recién liberada para que le creemos nuevas historias, y mi cuerpo desnudo para escribirlas.
Soy una hoja en blanco y tú mi escritor favorito.
OPINIONES Y COMENTARIOS