Esperabas algo más

Y ahí estaba ella, esperándolo, buscando una forma de salir corriendo, una forma de ocultar sus sentimientos, una forma de perderlo, de tal manera que lo detestara, odiara y no lo pudiera ver; aunque ella sabía que era imposible, comprendía que tarde o temprano él se enteraría, sabía que la descubriría y odiaría, pero ella no lo podía impedir, simplemente así lo sentía, así se sentía.

Pasando la noche con la luz de la luna, sentado bajo el mismo árbol donde todo empezó, donde todo termino, donde la terminó. Buscaba una señal, algo que lo ayudara a comprender lo que hizo mal, ¿cual fue mi error? ¿que hice mal? más no sabía que él no era el causante de tanta desdicha, no pensaba que él solo terminaría.

Bajando por el arroyo, cerca del mismo árbol, ella se encontraba tarareando una canción, la misma que no deja sus sueños, la canción de su amor, la canción de su tan conocido crush, quien la dejó fuera de órbita, aun sabiendo el daño que causaría.

Ahí estaban ellos, perdidos en un inmenso mar, cohibidos por la oscuridad, buscando la luz emanante de su igual, que sin saber se habían perdido, lo que comenzaron lo dejaron y lo que terminaron lo destrozaron, así era su vida, destrozar, romper, partir…oscura profundidad.

Mañana comienza un nuevo día, el sol se proclama victorioso ante la oscura penumbra de la noche, despertando con hermosos rayos a las aves más encantadoras, buscando en ellas una singular, una sin igual, aunque su canto suene igual algo la distinguirá, algo cambiara, más no se notara.

Mientas ellos distanciados están, una pareja camina entre los arces, paseando y disfrutando de la compañía mutua, pasando por el mejor momento de sus vidas, están juntos, que más pueden querer, si están perdidos no lo notaran o se asustaran, seria lo mejor que les podría pasar.

El tiempo vuela como una canción en la radio, cuando menos lo esperaras esta se acaba, termina; una relación conflictiva, una familia problemática, un divorcio, un hermanastro, una hermanastra.

La vida termina rápido, un choque, un golpe en la nuca, asesinato, y todos terminan en el mismo lugar, enterrados o en cenizas, qué más podrías esperar, a lo mucho, pasar un último momento con las persona que amas, con la persona que quieres, pero no pasa, te quedas atrapado en un sueño profundo, aguardando el momento oportuno para despertar, pero nunca sucede.

Te quedas inerte en el suelo, la cama, el sofá o donde hayas quedado, mientras otros temen dormir, tú buscas la comodidad del más allá, esperando tu momento, momento que no llega, hasta que mueras.