Cuando Platón y Nietzsche conversaron… en el Limbo de Dante.

«El amor auténtico, siempre se halla en el interior». Dijo Platón.

«El amor es lo único que puede trascender los extremos del bien y el mal». respondió Nietzsche.

«¿Entonces qué hacemos aquí? Si lo que hicimos fue por una simple razón… No trascendimos «más allá del bien y del mal» y vaya que en última instancia fue por amor… a la sabiduría». Le pregunto el maestro griego.

«Tampoco veo que las ideas inteligibles nos acompañen». Respondió desde su Zaratustra.

«Es porque solo Él es el mecanismo universal del sentido del cosmos, del mundo y de este breve relato que esta por terminar… Sólo Él es el amor que mueve el sol y las demás estrellas». Respondió un poeta de Florencia, Italia.