Corteza.

Corteza.

Susan

13/02/2019

La soledad es buena compañera, pero te acostumbras y aferras de una manera tan obstinada a ella, que a veces sientes que las personas estorban, y un día piensas que tanto tiempo esquivándolas no es sano para ti. Y muy en el fondo sientes la necesidad de importarle a alguien, a una persona que con un bobada te saque una sonrisa de oreja a oreja, un desconocido que simplemente despierte cada día con ganas de saber si eres feliz o si quieres serlo, porque el te ayudaría con todo el gusto. Una persona que con un solo mensaje te haga sentir bien, hasta recordar lo que es ser el centro de atención del mundo por un instante. Que te recuerda cada momento lo valiosa que eres,aunque ya tú lo sepas.

Por un momento piensas, sabes que has vivido siempre tratando de encajar y de ser la persona ideal para todos, pero te has fallado a ti. Te das cuenta de que has dependido tanto de otros que ya no sabes como actuar sola. Que has tratando de hacer todo perfecto para nunca fallar a los demás. Que eres solo una persona que quizás no quieres ser. Que tienes infinitas ganas de salir a la calle y hacer una locura.Que quieres ser la vergüenza de tus padres una vez en tu vida. Que no hablen bien de ti cómo lo han hecho todo este tiempo.Que sepan que eres fuerte. Que aunque cometas errores eso no te hace débil.Que puedes tomar miles de buenas decisiones pero que a veces necesitas permitirte fallar. Que solo sueñas con salir a correr descalza sin que nadie te pregunté por qué.

Y al final solo quieres que esa corteza que te envuelve se rompa, te deje ser libre. Y sueñas que en ese momento alguien se fije en ti, y por un segundo no pienses en lo que pueda pasar, solo dejarte llevar.

Ser tú así, sin más.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS