MEMORIAS EN EL RECUERDO

Rostros.

1° Parte

D – Recuerdas?

D – Recuerdas aquella tarde en la cúspide de nuestra juventud cuando intente ser caballero?

R – Recuerdo cada momento, cada palabra, cada suspiro y cada una de las eternas caricias… Aunque recuerdo que querías ser mi caballero, y no un simple caballero.

D – En aquel entonces de haberse presentado hubiese luchado mil batallas mas en amor a ti. Y aunque luche demasiado contra mi mismo, aun que gane y perdi nunca pude acabar con mis enemigos.

R – Oh!!. Demian… – «Suspiro» – He visto un millón de chicos como tu, arrogantes, algunos un poco inteligentes, pero chicos al final carentes de madurez, pero o único que diferencia a todos ellos de ti es que tu ahora te has apagado.

D – Ok!! Rouge… Entiendo tu punto y tu molestia, pero ahora dime ¿cómo matas a tus monstruos internos sin morir en el proceso? – «Suspiro» – El hecho de siempre haber vuelto a lo mismo no significa que te amara mas, quiza solo no te ame lo suficiente, pero la realidad es que te ame menos de lo que me amaba a mi mismo…

En aquel momento pareció que el tiempo estaba suspendido, los colores eran mas vivos y los sonidos más claros, podía escuchar el cantar de las aves y sentir a detalle las caricias del viento en mi rostro, podía ver claramente en color del cielo, del césped y cada todo en la blanca piel de Rouge. Vi y admire de nuevo las líneas de su rostro, tan peculiares en ella que recorde como se dibujaban con cada una de sus expresiones mostrando así su molestia… Mientras sus mejillas se tornaban en un rojo exquisito cual manzana, aquel rojo que ame en el pasado y por el cual hubiese entregado mi alma con tal de complacer.