-«El Bosque de los Lamentos»-

una hermosa vista a la distancia se podía apreciar desde aquella colina en medio de un gran valle rodeado de montañas y en el cual en medio cruzaba aquel cristalino riachuelo por el cual muchos se guiaban por el sendero hacia el gran bosque de pinos en lo mas alejado y profundo de aquella reserva ecológica en el municipio de Caldas.

nada mas que el sonido de las hojas en los arboles al ser llevadas por el viento; con una cantimplora metálica en mano toma en gran cantidad de lo que parece ser una mezcla de licor con algún jugo regional, sus ojos notablemente ojerosos era lo único que distraía de su hermosa apariencia, una tez blanca y cabellera negra sin maquillaje alguno, vestida con una camisilla negra, botas de camuflado y un jean cómodo para una larga caminata, una mochila sencilla para nada mas que lo necesario, así lucia esta joven que permanecía en lo alto de aquella colina algo fuera del sendero designado observando todo a su alrededor, con una mirada fija hacia la cima de las montañas donde el cielo comenzaba a apreciarse opacado por nubes grises que escondían el azul.

no muy lejos de ahí muy abajo por el sendero se podía ver un gran grupo de personas guiados por varios guardabosques en lo que podría ser una caminata ecológica programada por alguna empresa o institución, lo cual era muy común debido a lo hermoso del recorrido y el gran interés del departamento de medio ambiente en mantener conservadas estas áreas.

desde el gran grupo conformado en su mayoría por jóvenes adultos, una de las mujeres quien a su lado tenia quien parecía ser hija quien noto a la distancia y en lo alto a la chica sobre la colina, comenzó a señalar e insistir lo suficiente que uno de los guías detuvo el grupo y se percato por igual, -«es alguien de este recorrido?»- pregunto la chica guía revisando su carpeta con la lista de nombres de todos quienes estaban en el recorrido, mirando al grupo y preguntando en voz alta -«nos falta alguien del grupo?»- a lo que todos miraban a su alrededor regresando la respuesta con un no estando seguros que todos estaban allí, -«debe ser una bruja seguro»- clamo un joven en medio del grupo acompañado por otros que rieron de la supuesta broma con fuerza, a lo cual una chica replico con algo de molestia y temor, -«no comiencen a decir estupideces pues»-, entre sus tontas risas el joven quien al parecer se creia el lider comico del grupo levanto el grupo llamando la atencion de la guia y con voz alta pregunto asegurandose que todos escucharan, -«señorita como se llama la pinera a la que nos dirijimos?»-, aunque la pregunta maliciosa era obvia nada mas que para indisponer a los demás era cierto que aquel lugar tenia un particular nombre. -«el valle de las brujas»- responde en seco la guia tratando de guiar el tema en otra dirección, pidiendo de favor al su compañero el ir a verificar que aquella chica no fuera parte del grupo. -«Gustavo… es mejor que mires si ella no venia con nosotros o de pronto esta entre las personas que no viajaron en el bus principal, mejor no dejemos descartado a nadie»- a lo que el asiente de buena forma y dejando su equipo en el suelo pide al grupo esperar un momento luego se apresura cruzando una cerca en camino a subir la colina hacia aquella chica, quien desde lo alto lo ve venir, tomando su maleta guardando su cantimplora y con algo de molestia en su rostro comienza a decender en dirección al guía, quien al verla bajar la saluda amablemente esperándola en la mitad de la colina, ella simplemente le cruza de largo en dirección al gran grupo dejándolo con la duda en la boca sobre si ella era parte de este mismo, al ver que ella se encaminaba con los demás decide bajar nuevamente, tomando sus cosas y al lado de su compañera retoman el recorrido, -«bueno ahora Natalia nos continuara contando mas sobre el proyecto del medio ambiente dedicado a esta gran reserva ecológica»- Gustavo le da el liderazgo de nuevo a su compañera quien antes de comenzar nota como aquella chica permanece en medio del grupo sin que nadie al parecer la reconozca y con algunos incluso murmurando sobre lo extraña que lucia, al igual que aquel grupo de patanes en medio de todos que seguían señalando y riendo sin mucho pudor sobre todo lo que les apetecía, a lo cual la chica era completamente indiferente, mas solo una cosa llamo su atención, la pequeña que noto su presencia en lo alto de la colina, quien ahora estaba a su lado mirándola con una tierna sonrisa. a lo que la chica replico con un mal gesto -«vete donde tu madre»- mas la chiquilla no dejo de sonreír y respondió -«que hacías tan alto y sola?»-, sin mirarla respondió -«no te importa»- la pequeña solo hace un gesto imitándola levantando los hombros y luego hace un comentario mas. -«hueles a lo mismo que solía oler mi madre»- refiriéndose al notable aroma de licor que ella emitía al parecer había comenzado a tomarlo desde muy temprano, lo cual afirma ella con su respuesta -«bueno llevo un largo rato esperando…»- a lo que con su rostro de duda pregunta la niña -«esperando que?»- la chica guarda silencio, en aquel momento el grupo continua su camino por el sendero al borde del riachuelo, entre risas, burlas, charlas y compartiendo conocimiento con los guías el grupo disfrutaba de aquel recorrido ecológico entre hermosos charcos cristalinos formados entre pequeñas estaciones en el riachuelo donde se detenían a tomar fotos, y entre todos la chica podía observar a la chiquilla que la miraba constantemente con gran curiosidad a lo que ella simplemente retiraba la mirada, esperando recostada en un árbol alejada solo un poco del grupo esperando el tiempo pasar, ignorando a todos los demás en sus asuntos con la mirada fija en el cielo y sobre las colinas, -«te ves algo distante, te gustaría algo de esto?»- ofreciéndole una pequeña arepa con queso Natalia y Gustavo se acercaron a ella, quien sin míralos solo respondió de forma seca con un seco no en gesto, -«Disculpa, como te llamas? quisiera ver si vienes con nuestro grupo o con el siguiente»- pregunta Natalia a la vez que revisaba su agenda con nombres, -«no vengo con su grupo»- respondió la chica, -«ah esta bien no nos molesta si deseas acompañarnos, es mejor que recorrer el lugar sola»- dijo Natalia retirándose con algo de molestia pero sin perder su amabilidad, reparándola con la mirada notando la cantimplora metálica, -«no deberías ingerir licor en este lugar»- continuando su camino hacia el grupo, Gustavo quien aun permanecía allí envolvió la apera con queso en una bolsa desechable dejándola justo al lado de la cantimplora de la chica diciendo algo amable antes de retirarse, -«sabe mejor caliente, el queso de este lugar es muy bueno deberías probarlo no es bueno caminar tanto con el estomago vació»- ella levemente mira de reojo pero este ya se retiraba, a lo que mira la bolsa con la arepa recogiéndola sin perder de visa al grupo, luego solo la mete en el fondo de su maleta regresando su mirada al cielo, tras de ella el grupo ya había comenzado de nuevo su recorrido hacia una entrada que guiaba hacia el fondo y alto de la colina y que a su lado tenia un gran puente el cual conectaba con el bosque de pinos, el grupo se detuvo en aquella gran entrada para recibir indicaciones, sin embargo se podía ver que ya algunas personas tenían planes de ir en otro camino hacia el bosque de pinos, y no muy lejos pero delante de ellos ya se encaminaba aquella chica quien sin mediar palabra solo continuo hacia aquel lugar, -«bueno grupo esta es la entrada principal a la zona protegida dentro de la reserva ecología, aquí encontraremos fauna silvestre como plantas las cuales debemos proteger así que por favor eviten la basura o salirse del sendero que tendremos designado»- Natalia mira como quienes se separan del grupo ya comenzaban a retirarse por lo que mira a Gustavo quien los alcanza solo para darles algunas indicaciones, estos se detienen entre risas y escondiendo una gran botella de licor al ver acercarse al joven guía quien con un gesto de desaprobación pero dejando de lado el hecho ya que no seria mas su responsabilidad solo les aconseja -«chicos por favor tengan cuidado hacia que lado van a ir recordemos que el bosque es muy denso y es fácil perderse si no conocen el lugar»- a lo que una de las chicas quien con sus notable ojos rojos entre risas dejo claro hacia donde se encaminaban, -«vamos a la casa abandonada en el valle de las brujas»- aclara riéndose -«por si llueve»- a lo que Gustavo reacciono con un gesto de preocupación, sin embargo no dijo mas al mirar que se trataba de varias personas, -«de cualquier forma sean lo mas prudentes posible»- así el regreso con el grupo principal cruzando a la zona protegida y continuando con su caminata ecológica dejando a tras a quienes al parecer planeaban acampar aquella noche en la casa abandonada en medio del gran bosque de pinos llamado valle de las brujas.

la tarde comenzaba y mas aun en la oscuridad del cielo que cubierto por las nubes grises daba un aire bastante sombrío al bosque de pinos cuyo suelo de pasto suave y verdoso cual musgo levantaba una leve neblina en todo su interior, y así en medio de aquel bosque de pinos por un camino apenas visible el grupo que se dividió del recorrido se encaminan a lo mas profundo en busca de aquella casa, no mucho tardan en notar que mas adelante en el mismo recorrido se alcanzaba a ver aquella chica que habían encontrado en lo alto de la colina, la extraña a la cual el mas ruidoso del grupo en carcajadas afirmaba como bruja, -«les dije que habían brujas en este lugar»- aseguraba mientras tomaba una gran bocanada de su cigarro, mientras sujetaba a quien parecía ser su novia por la cintura acercándola a el con firmeza. -«así son las solteras… o no?»- a lo que su pareja respondió algo indispuesta por el aroma a cigarro -«ay Carlos te he dicho que no me fumes en la cara»- empujándolo un poco para alejarse del olor mientras el simplemente se reía de ella, su amiga se acerco tomándola de la mano para alejarla de el, -«vamos Cami cuando lleguemos nos tomamos unas cervezas y relajamos un buen rato»- lo cual no parecía ser tampoco de mucho gusto sin embargo era mejor que continuar con su pareja, uno de los otros en el grupo señalo -«Juli no crees que deberías ir con Cami a ver que es lo que busca esa pelada tan rara?»- a lo que ella respondió negando con la cabeza y aclarando -«no me interesa seguro va para la casa también, esa gente rara es mejor dejarla sola»- a lo que Carlos rió y de forma déspota dijo -«seguro se va a cortar las venas por alla»- Camila lo miro con de forma seria en señal de disgusto -«pero como dice eso!»- a lo que el solo siguió riendo con una carcajada seca.

Desde su distancia a ellos la chica podía escuchar sus carcajadas las cuales le fastidiaban un poco, por lo que aceleraba el paso como si deseara llegar a tiempo a algún lugar; la soledad no le molestaba pero el lugar comenzaba a tornarse un poco denso a medida que llegaban a la casa, la noche se acercaba por lo que el camino en frente se hacia mas oscuro la neblina dificultaba en gran medida ver el camino, ademas del frió que aumentaba en medida avanzaban, por lo cual tomo de su maleta un saco negro que tenia guardado, algo desgastado pero aun útil para ella.

-«y como te llamas?»- una voz repentina la detuvo de golpe mirando a su alrededor algo asustada hasta percatarse de la niña que conoció en el grupo, a lo que entre molesta y preocupada la chica se acerco a ella preguntandole -«que haces aqui? donde esta tu madre»- a lo que la niña sonriendo replico -«ella esta aquí»- a lo que la chica miro al grupo que estaba tras ella algo indignada mirando a las chicas en el -«no puedo creer que te hayan traído a un plan tan toxico para ti»- tomando la iniciativa, continuo caminando junto a la niña sin decir nada a lo que la pequeña trato de tomarla de la mano pero esta la rechazo cruzando sus brazos, sin embargo los ojos tristes de la pequeña la forzaron a cambiar de opinión ofreciéndole su mano para caminar.

-«no te da miedo este lugar?»- pregunta la chica tratando de ser intimidante con la pequeña, sin embargo a cada negativa o pregunta fuerte la pequeña solo sonreía y respondia, -«no, se parece mucho a donde vivo»- a lo que la chica entendio un poco y pregunto -«así que eres de por aquí?»- a lo que la niña le retiro la mirada negando con la cabeza nada mas, por primera vez la pequeña cambio su semblante guardando un largo silencio, -«me llamo Laura»- a lo que la pequeña volvió a sonreír. juntas comenzaron a conversar un poco mas acercándose a la casa en medio del bosque de pinos, entre curiosas historias sobre ella y dejando mas su frialdad Laura comenzó a dejar de lado su semblante sombrío entre leves sonrisas causada por las ocurrencias de la pequeña, casi ignorando la presencia chocante del grupo tras ellos.

ya cerca la noche la casa se alcanzaba a ver desde no muy lejos, una antigua construcción abandonada hace muchos años por quien quiera haya vivido por un largo tiempo en estas tierras, y aunque estaba en ruinas aun tenia gran parte de su techo como de algunas habitaciones solo afectadas por el paso del tiempo pero protegida por el bosque a su alrededor que incluso evitaba que las fuertes tormentas la dañaran, en la entrada se podía ver un pequeño lugar de juegos para niños un deslizadero un columpio y otros dos juegos ya consumidos por el oxido y la maleza sobre ellos, Laura junto a la pequeña se sentaron sobre los columpios disfrutando de un buen rato ignorando a los demás quienes cruzaron de su lado mirando con extrañeza mientras seguían hacia la casa donde comenzaron su fiesta dejando música a gran volumen y encendiendo una fogata en la parte de a tras de la casa para lo que planeaban comer. -«tu madre no parece importarle mucho donde estas»- dijo Laura mirando a las jóvenes bailando con los hombres que las acompañaban de forma desinteresada entre bebida y cigarrillos, a lo cual la pequeña detuvo el columpio, -«mi madre si se interesa, es solo que ella esta triste… y se siente sola»- a lo que Laura regreso la mirada de nuevo a las chicas, entre ellas aquella que parecía no estar muy a gusto con los demás llamo su atención -«creo que deberías acompañarla mas»- dijo Laura con cambiando su semblante ahora un poco nostálgico, la pequeña la miro fijamente y le pregunto -«y tu madre? tu la acompañas?»- a lo que Laura no dijo mucho mas que miro fijamente a su maleta la cual había dejado no muy lejos de allí recostada sobre un árbol, -«no… mi madre esta sola, pero tienes razón debería hacer caso a mi propio consejo es solo que…»- a lo que la niña puso su manito sobre la mano de Laura y con un rostro comprensivo dijo -«estas triste también verdad?»- Laura dejo caer una lagrima la cual limpio casi de inmediato -«tu me recuerdas a mi hija, era igual de sonriente y…. creo que también hago muchas tonterías… y eso hace que mi madre este triste»- la pequeña se bajo del columbio y camino frente a Laura, -«que le paso a tu hija?»- Laura sonrió con los ojos llorosos y se levanto en camino a su maleta, pero sin antes arrodillarse frente a la pequeña a quien le dio un abrazo y le dijo -«me esperas en el columpio yo debo hacer algo no tardo y te acompañare donde tu madre te parece?»- a lo que la pequeña asintio pero no sin antes preguntar -«y tu que harás?»- Laura mantuvo la mirada fija en su maleta -«ya regreso»- dijo cortante, a lo que la niña se quedo mirándola mientras se alejaba hacia la maleta, -«deberías regresar con tu madre también seguro ella te extraña como tu extrañas a tu hija»- Laura continuo sin decir nada y abrió su maleta de forma afanada en ella había una pequeña urna y al lado de esta envuelto en una pequeña toalla una cuchilla muy afilada, Laura saco ambas y acto seguido abrió cerca al árbol un pequeño agujero donde con delicadeza dejo la pequeña urna la cual acaricio dejando correr una lagrima, luego mirando fijamente la cuchilla la enterró por igual donde también puso su cantimplora metálica no antes sin vaciar todo el licor en ella, luego cubrió por completo todo con tierra, no quedando nada en su maleta mas mas que una carta la cual guardo con cuidado levantándose con una actitud determinada, al regresar la mirada a los columpios noto que la pequeña ya no estaba, por lo que sea cerco con algo de duda, a su ves pudo ver a las dos chicas que también venían hacia ella algo ebrias pero sonrientes al parecer querían hablar con ellas, Laura las ignoro suponiendo que la pequeña estaba de nuevo con ellas así que solo se sentó en el columpio dándoles la espalda, -«oye por que no vienes comes y tomas algo?»- dijo Juliana entre tumbos tocando el hombro de Laura, -«estoy bien»- respondió cortante a lo que Camila riendo a carcajadas -«no estas bien loca, estas completamente mal, seguro hasta eres bruja»- a lo cual Laura molesta se levanto y le recrimino -«no debería estar mas bien pendiente de su pequeña? que clase de imbécil trae a una niña a este lugar para ver a su madre beber y fumar con esos patanes»- a lo cual Camila y Juliana quedaron por un momento en shock ante sus palabras para luego comenzar a reír sin parar, -«de que hablas bruja no tenemos hijas jajajajaja»- dijo Juliana -«aquí la loca eres tu llevas hablando sola por horas desde que te encontramos, que es lo que fumas?»- a lo cual Laura miro extrañada y exaltada a su alrededor y no vio a la pequeña por ningún lado solo al grupo de ebrios y borrachas, en ese momento los hombres llegaron, sus ojos completamente dilatados consumidos por la droga, -«que pasa por que no vienen»- reclama el hombre sin control de su cuerpo, -«esta loca que lleva hablando rato sola reclamándonos por la hija»- a lo que Carlos reacciono de forma violenta por alguna razón -«cual hija, como asi es que ud no aborto nada??»- alertada Juliana lo trato de calmar entre susurros -«si si es que esta loca anda diciendo incoherencias»- entre tumbos Carlos y sus amigos se acercaron a Laura con una mirada fría y molesta, uno de ellos la intento tocar por detrás pero esta lo golpeo con fuerza, luego Carlos quien era mas grande la golpeo en el rostro con fuerza, -«por que no quemamos esta bruja ome, como que sabe mucho»- dijo con seguridad a lo que los demás a pesar del shock de sus palabras no dudaron en actuar y corrieron a tomar una soga y a sacar una antorcha de la fogata, Laura aturdida trato de alejarse arrastrándose sin embargo Carlos la agarro de sus piernas acercándola de nuevo entre las risas de los demás, fue entonces cuando el fuego se extinguió por completo la música se detuvo y la luz se fue, solo quedando un sonido de estática en el reproductor, un silencio recorrió el lugar seguido por una melodía que comenzó a sonar entre la estática, el sonido de una guitarra y una voz antigua…

(escuchar canción)

La canción comenzó ante el terror de todos -«My girl, my girl, don’t lie to me Tell me where did you sleep last night In the pines, in the pines Where the sun don’t ever shine»- el eco del bosque comenzó a dejar escuchar un coro de lamentos provenientes de todas las direcciones a lo cual el grupo dejo caer todo lo que tenian en manos y aun entre su ebriedad y estado de drogas el terror era inevitable mientras la canción continuaba haciendo eco -«Her husband, was a hard working man Just about a mile from here His head was found in a driving wheel But his body never was found My girl, my girl, don’t lie to me Tell me where did you sleep last night In the pines, in the pines Where the sun don’t ever shine I would shiver the whole night through…»- el constante eco de los lamentos comenzó a hacerse mas fuerte entre la estática y el sonido de la canción, el temor fue tal que Carlos saco de su cinturón un arma de fuego la cual comenzó a apuntar hacia la oscuridad del bosque lo cual hizo que la melodía se detuviera por un momento de golpe al igual que todos los sonidos de lamentos alrededor, Laura logro levantarse del golpe que Carlos le propicio y sin pensarlo comenzó a correr por el bosque dejando su maleta detrás, enfadado Carlos no podía permitir que luego de lo que ella vio escapara aun menos de ya haberlos visto por lo que comenzó a perseguirla indicándole a todos que debería hacer lo mismo -«Si esa perra se escapa nos meten a todos carcel!»- así que cargando su arma comenzó a perseguirla junto con los demás quienes a pesar de su estado molestos y aterrados no podían permitir que luego de lo que pretendían hacer alguien escapara, entre el denso bosque ahora sumido en total oscuridad Laura corría por su vida con un fuerte pensamiento y deseo de volver a ver a su madre por lo que con cada fuerza en ella avanzaba sin dudar, pronto el eco de fuertes lamentos comenzó a aumentar confundiendo a todos con excepción de Carlos quien sin titubear avanzaba enfurecido haciendo tiros en dirección a Laura.

Pronto Laura se detuvo de golpe al ver la silueta de una pequeña en la distancia, la cual señalaba a su izquierda, sin dudarlo ese camino tomo Laura avanzando sin pensar y con esperanza de sobrevivir así continuo hasta ver en la distancia el riachuelo que señalaba el camino que los grupos suelen seguir para entrar y salir de la reserva, con prisa Laura se encamino hacia este para guiarse con facilidad hacia un lugar fuera de allí, pero fue alcanzada por uno de los disparos que Darlos hizo el cual le roso la pantorrilla haciéndola caer fuertemente, pronto alcanzada por el grupo dispuestos a matarla Laura se arrastro lo mas posible sin darse cuenta hasta el borde fuera del bosque de pinos, Carlos quien la seguía cerca llego al lugar apuntando su arma directo a su cabeza, los demás solo observaban afirmando lo que debían hacer una vez la mataran -«tenemos que quemarla también…»- decía Juliana, es cuando la oscuridad y neblina en el bosque comenzó a tornarse mas densa la neblina comenzó a subir mas y mas hasta cubrirlos por completos a excepción de Laura quien estaba fuera del bosque, y quien perdió de vista al grupo que la perseguía el cual fue consumido por las sombras y neblina dejando solo escuchar un repentino conjunto de gritos de gran dolor el cual parecía provenir de las voces de todos ellos, alaridos tan fuertes que rompían el silencio del valle, sin embargo entre toda la oscuridad en el bosque la silueta de una pequeña se podía ver claramente, Laura aterrada y malherida simplemente se recostó con la mirada al cielo desmayándose por completo.

Un sonido familia de pájaros cantando y una calidez sobre su rostro, sin poder ver nada mas que un deslumbrante sol sobre ella, su ropa llena de musgo y algo mojada, con un leve dolor en su pierna, pero pudiendo caminar, y algunas risas cerca de ella, un gran grupo de un colegio que cruzaba en su caminata ecológica cerca a ella solo reían de lo que parecía ser una chica que se quedo dormida a la intemperie por la bebida, Laura se levanto mirando de frente al bosque el cual ahora se veía tan diferente lleno de luz y colorido, a su lado tenia su maleta la cual pesaba un poco de nuevo, al abrirla de inmediato pudo ver la urna que había enterrado mas solo eso, no estaba el cuchillo ni la carta, solo la Urna la cual al parecer había sido desenterrada pero estaba acompañada de unas lindas flores, algo confundida sobre esto, Laura solo observo al cielo ahora de azul sin nube alguna; cojeando un poco se acerco al riachuelo cristalino donde se arrodillo para lavar su rostro, se limpio la herida y se dispuso a caminar, pero antes pudo ver como un grupo de policías a caballo se encaminaban al bosque, lo cual alerto al grupo de estudiantes y entre susurros mencionando lo que tal vez paso, entre el grupo Natalia y Gustavo reconocieron a Laura saludándola este ultimo se le acerco preguntándole con sorpresa -«cuando regresaste?»- a lo que Laura puso un rostro de extrañes -«a que te refieres?»- por lo cual Gustavo respondió nuevamente -«no te veo hace semanas pensé que no te había gustado el recorrido»- el semblante de Laura cambio por completo, a lo cual Gustavo le ofreció una arepa con queso, Laura solo sonrió y la acepto esta vez de buena actitud, -«espero estés bien te ves diferente»- dijo Gustavo alejándose continuando el camino con el nuevo grupo.

sus ojos brillaban diferente, y con una leve sonrisa Laura acomodo su maleta y comenzó su camino de regreso, disfrutando de la comida que le habían ofrecido, caminando con dificultad pero con seguridad encontrando personas en su camino hasta cruzar por la colina en la que conoció al grupo, deteniéndose para ver a lo alto donde ella estaba sentada, ahora allí podía ver a lo lejos una pequeña en la sima quien al verla se puso de pie saludándola con la mano en alto, luego dando la espalda y desapareciendo a la distancia, quienes cruzaban al lado de Laura reían entre murmullos al verla saludar a la nada, ante esto Laura solo sonrió y continuo su camino lejos del bosque lejos de los pinos, por el riachuelo cristalino entre colinas y montañas de regreso a su hogar, donde su madre lleva tiempo esperándola, donde desea volver, ahora sin lamentos en su corazón si no con una fuerte convicción.

FIN -Historia 1 El Bosque de los Lamentos-

(Primera Historia sobre el Bosque de los Lamentos, tengo en mente varias, espero les sea de su agrado y bienvenidas todas las criticas constructivas ya que me gustaría crecer mas en el arte de la escritura)

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