Sueños

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Cuando te vi por primera vez tuve una sensación extraña algo indescriptible para mí, ya que no sabía que era esta sensación.

Nunca avía sentido nada igual por alguien. Fue entonces cuando pensé ¿Por qué siento esto que nunca sentí antes? A lo cual no tenía respuesta pasaron los días, y te miraba más seguido más constaste y cada vez, más y más sentía eso que para mí no tenía explicación. Al mirarte sentía que mi mundo se abría hacia ti que todo era posible, que podía volar y naufragar si tú me lo pedías.

Pero aun no sabía que era el sentimiento que me impulsaban a realizar dichas acciones. Con tan solo mirarte alegrabas mi día iluminabas mis noches y velabas mis sueños. Quería decirte lo que siento pero no podía, porque no sabía cómo describirlo.

Soñaba con tigo que te tomaba de la mano y que caminábamos juntos como almas gemelas, soñaba que éramos como la arena y el mar que están unidos por la naturaleza, imaginaba que eras el oxígeno para seguir viviendo. Pero era un sueño; una mañana al verte decidido a todo me acerque donde estabas tú y te pregunte todo tembloroso ¿A dónde vas? Y tú me miraste sonreíste pero nunca respondiste. Al pasar el tiempo ya no te veía más dejaste de iluminar mi día y como todo tiene un inicio decidí llevarte siempre en mis sueños y que fueses la guardiana de mis noches. Ya que siempre aparecías en mis noches diciéndome que la vida es mejor juntos que alejados y decidí tomarte entre mis brazos y decirte, lo mucho que deseo tenerte siempre a mi lado. Porque tú siempre vivirás en mis sueños más ternos y profundos