Fuego en tu mirada, arde, quema, como tus manos rosando tu espalda… Acariciando lentamente tú cuerpo, en mi boca al raz de mi garganta profunda donde salen lavas que fulminan.

Y estás manos que fluyen entre tus piernas, sientes el cosquilleo en tu piel, es un placer que sientes al jugar alli, tú abdomen y tus caderas se mueven al compás de mi respiración y la tuya.

Una onda suave, fuerte y lenta produce todo tu cuerpo desnudo y un hermoso escalofríos entre tus piernas. Tú desnudez, se que me gusta verte así, tan ardiente eres, pero tú me enciendes aún más a mi, se que te gusta cuando muerdo tu corazón con todo mi sentir, apretando tan fuerte tú alma.

Lo sé es exitante mirarte desnuda un gran juego de pasion, qué bella seducción, qué bello el gemido en mis oidos, qué bellos cuerpos entrelazados en una sola piel y alma.

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