Fecundo: El ser de un extraño mundo.

En una bella ciudad de un extraño lugar, habitaba un pequeño ser… Que muy pocos podían ver.

Los habitantes de la ciudad caminaban sin observar, que alguien se encontraba con ellos, observando sus movimientos. Camuflándose con su entorno, este pequeño lo veía todo; Veía como las criaturas de la ciudad, dependían del que dirán. Las jirafas con tacones grandes para verse más elegantes se veían en las plazas conversando; Con su amigo el dinosaurio, aquel que, con traje y corbata, se dedicaba a ganar plata. Él estaba a punto de hablar, con el alcalde de la ciudad, para hacer un negocio singular. Un gorila gigante y de trajes elegantes; que tenía muchos diamantes.

Micos mas pequeños le brindaban seguridad, estaban por todos los arboles de la ciudad.

Nuestro amigo desde las ramas observaba, cómo los leones se organizaban, ellos querían derrotar, al alcalde de la ciudad.Creían que al ser mas fuertes y por tener melena. Podrían tener toda la grandeza, la envidia era el pan de cada día y las criaturas como las ardillas muy tristes se sentían.

Finalmente, una ardilla a un árbol subió y esta algo observó: vio un cuerpo extraño de ramas, estas todo le rodeaban, ojos grandes y amarillos transmitían todo su brillo; para ser mas exactos era como una enredadera, con manos en rama, piernas en rama que a todo se aferraba, su pelo era de hojas grandes y verdes, era un ser pequeño y sonriente.

La ardilla sorprendida le pregunta, ¿Que rayos es esta criatura? Este con una sonrisa le responde. Soy el hijo de la tierra, aquel que todo lo observa, tengo muchos nombres en el mundo, pero el mas cool es cuando me llaman Fecundo.

La ardilla lo miró con cara de curiosidad, pues no creía que Fecundo le pudieran llamar. Esta sutilmente le pregunta; ¿Acaso ese nombre tiene algo en especial? Pues yo en mi mundo no lo he llegado a escuchar.

Fecundo muy pronto sonrió y este le contestó:Fecundo es sinónimo de fecundar, yo plasmo felicidad y mucha seguridad, me dedico a observar a quienes puedo ayudar. Por lo visto en tú planeta, yo encuentro mucha nobleza. Pero también puedo observar que el mal de varios se quiere apoderar…

La ardilla no lograba comprender, porque él eso podría ver, está pronto le reconoció que mundo poco a poco perdía el control.

Sus amigos, familiares y conocidos, comenzaron a usar vestidos. Los elefantes dejaron de jugar y los marranos no se volvieron a ensuciar. Los cocodrilos ríos por jacuzzis cambiaron y los osos nunca mas hibernaron.Las rinocerontas empezaron a usar rubor y después… Todo Cambió.

Fecundo a la ardilla felicita, pues el en ella nada malo veía; También le solicita un favor y es conseguir un ejército del amor.

La ardilla entusiasmada levanta sus orejas, para escuchar todo lo que la rodea.Casualmente logra conseguir oír a una familia de colibrís. Fecundo a un colibrí llamó y el volando se acercó.Era un Colibrí distinto a los demás, pues tenia silla y se podía montar. Era el amigo de fecundo, el guerrero mas fuerte del mundo; Sus rápidas alas le hacían imposible de alcanzar y con su pico todo lo podía transformar.

L ardilla logra su objetivo, que su familia y amigos se unan a su destino. Todos querían ayudar para vidas poder mejorar…

Pequeños de todas las especies se unieron, para que todo fuese perfecto, que sus padres volvieran a jugar y amar sea su prioridad. Las cebras con los leones se hicieron, pues estos siempre han estado compitiendo.

Fecundo y el guerrero lideran el ataque y los hipopótamos salen a ayudares, estos saltaron a los charcos de la ciudad y los adultos se comenzaron a ensuciar.

Osos polares forman una guerra de nieve… Tirando bolas por toda la ciudad, con el fin de la amargura congelar. Las sonrisas se comenzaron a escuchar y pronto los trajes se comenzaron a quitar, relojes volaban por los aires y al mismo tiempo los diamantes.

Fecundo pudo lograr que la ardilla pudiera cambiar su ciudad.

La diversión se convirtió en el pan de cada día y la felicidad muy fuerte se volvía.. Así Fecundo todo lo cambió, pues logro derrotar la envidia y el que dirán, para traer la alegría y humildad.