La naturaleza salvaje despierta ecos en mi corazón.
sonidos casi olvidados
que gritan desde ese rincón no visitado
quizás desde hace demasiado tiempo.
revive la llama que espera, paciente, volver a brillar.
Hoy he sentido la llamada profunda de mi ser.
El grito anhelante par la comunión con ella.
Me he sumergido en sus frías aguas
que me han acogido con inmenso amor.
Ha sido una unión vibrante
una alegría sin palabras
un placer indescriptible
un renacer sin límites.
yo era la naturaleza, la naturaleza era yo
Doy gracias a la vida
por el privilegio de vivir este dulce momento
PINCELADAS
Destellos de almas
Lncuentros fugaces
lugares ya conocidos
Reconocidos
En el camino
Alegría por el reencuentro
Seguimos adelante
Sin tiempo
Sin espacio
El ser
La nada
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