Mientras mi mente sea mia, seguiré pensando cada vez diferente, de la misma forma.
En cada paso mis pies hicieron del barro su única horma.
Deja que el silencio te diga al oído.
Deja que la soledad te aturda a gritos.
Deja que el esfuerzo se encargue del fracaso,
Pues ya no diferencio una piedra en el camino de un piedraso
Puesto que en mi embarazo a medias me han parido.
No entiendes de lo que hablo porque te limitas a solo escuchar lo que digo.
No es el oro, si no, los callos al pulirlo, y pulir.
Estoy con medio atlántico encima, pues mucho no me importa que tanto la vida me quiera hundir.
Aprendo un poquito cada vez ya que mis errores han empeorado.
Mis pesadillas cada vez son peores, pero cada vez despierto menos asustado.
Si tan sólo te dejaras enseñarte,
No sólo es que tan fácil te levantas, si no, que tan difícil se les hace tumbarte.
OPINIONES Y COMENTARIOS