Una persecución

Una persecución

Voy por la calle una noche de tantas, había salido ya muy tarde del trabajo, caminaba a un ritmo despacio cuando de pronto, alguien sale de una bocacalle y comienza a perseguirme, yo hecho a correr. Se produce una persecución entre un extraño sujeto y yo.

Jamás me había encontrado en semejante situación, mis piernas sudaban, sentía un frio que recorría mi espalda y me hacía retorcer mientras caminaba cada vez más rápido; cuando me di cuenta que aquel sujeto se acercaba a mí más y más eché a correr sin mirar más atrás, me tropecé torpemente al intentar sacar el celular de mi bolso para llamar a la policía, no podía escapar, acababa de caer y aquel sujeto de gabardina larga me tomo del brazo fuertemente para levantarme y pedirme mis pertenencias por medio de violencia, me rehusé y me dio una bofetada, fue entonces cuando supe que el sujeto no cargaba pistola o arma alguna, al menos no más que sus puños; así que saqué mi tableta y decidí utilizarla para propinarle unos buenos golpes con ella, creo que lo sangré un poco, comenzaba a tambalearse hasta que cayó al suelo mientras yo rompía poco a poco mi tableta, creo que al final, eso fue una estupidez, mejor le hubiese dado la tableta, de cualquier forma el aparato se destruyó.

Fue mi coraje e instinto de supervivencia, si podemos llamarle así, lo que me puso tan violenta, jamás imaginé que el solo robaba para poder salvar la vida de su madre moribunda, la cual requería un procedimiento de urgencia, el hombre estaba desesperado.

Se preguntarán como fue que supe todo esto, pues bien, al terminar de propinarle aquella paliza, temí haberlo matado (algo absurdo) desde luego, decidí transportarlo en taxi a un hospital, lo deje en urgencias y al tercer día me notificaron que los golpes solo le provocaron un par de contusiones, que podía pasar a verlo , cuando entre él estaba llorando y lo último que me dijo fue “yo solo quería salvar a mi madre”, hoy me corrieron del trabajo y ayer los médicos notificaron a mi madre que tiene un tumor cerebral el cual tiene que ser operado de urgencia, tres días o morirá; sé que robar no es bueno, y jamás lo hice antes, pero por salvar la vida de mi madre pensé que eso serviría, pero ya han pasado esos tres días, hoy mi madre tal vez ya este muerta.