En 26 páginas expresa este libro que como seres humanos e hijas/os de Dios tenemos que tener la mejor conducta sin importar de donde somos, quienes somos, extracto social, raza, religión, aunque nuestro Señor Jesucristo no es religión, la idea es no ser hipócritas los unos con los otros y dejar de mentir acerca de la vida del prójimo, ya sea que sea niño/a adulto/a, anciano/a.
Tenemos dos grupo vulnerable que es la niñez y los/as ancianos/as, pero Dios es valiente para decir la verdad, ya que estos/as no pueden defenderse de un adulto/a joven que en esta juventud se divide en varias fases.
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