«Dos vidas , un destino» 2

Y si estas almas se volvieron a encontrar en este gran mundo paralelo…

Después de una larga espera, mientras el cielo cambiaba de colores y las estrellas danzaban en silencio, llegó el día del encuentro, dos almas que habían soñado con verse, tocarse, sentir el uno al otro, el lugar y la hora ya estaban pactados, y las emociones vibraban con fuerza.

Ella llegó primero, vestida de negro, con sus lentes oscuros y su celular en mano, buscando con la mirada. 

Él, tímido, pensaba que no estaba lo suficientemente arreglado para verla, pero cuando sus ojos se cruzaron, las sonrisas brotaron como flores en primavera, los nervios se desvanecieron, y el abrazo que se dieron fue más que un gesto: fue un bienvenido a casa.

Al verla tan cerca, él pensó:
Verte tan radiante, con tu mochila al hombro saliendo de clases, el contraste de tus lentes oscuros y tu cabello como la noche, una combinación tan misteriosa como encantadora, tenerte cerca me deja sin palabras, tu aroma me envuelve, y ese primer abrazo… ese abrazo no fue común, fue como volver a casa, como si nuestras almas se reconocieran en un instante eterno.

Ese instante tenía nostalgia, magia, y todas las señales de que el universo había conspirado para reunirlos. Sus manos encajaron como piezas perfectas, sus aromas se entrelazaron, sus sonrisas eran únicas. Así comenzó una historia de amor donde ninguno se queda atrás, donde ambos caminan juntos, creando un sentimiento que dice: ya estamos en casa.

Ella pensó:

¿Cómo es posible es posible esto?, mientras sus ojos se perdían en los de el, tan chinitos tan bellos, como dos luceros escondidos tras un velo de misterio, había algo en su mirada que no solo la observaba, sino que la leía, la entendía, como si en otra vida ya se hubieran amado en silencio y en ese instante, el tiempo pareció detenerse, como si el universo quisiera regalarles unos segundos más de eternidad.»

Un amor que florecerá a pesar del tiempo y las circunstancias, tan único como verdadero.
Y esta historia tiene dos iniciales: K y C  y sin decir una palabra, sus corazones se prometieron no soltarse jamás, sin importar cuántos mundos tuvieran que cruzar.»

Continuara…………………………………………………………………………….