
Madrid 13 de Junio 2025
La muerte no es el final. 2.912 palabras.
Sería a finales del año 2024 cuando vimos y escuchamos la entrevista de este doctor cirujano, en un programa de televisión, Cuarto Milenio, presentado por Iker Jiménez. Hablando de que la muerte físicamente del cuerpo, no acabase la existencia del individuo.
Recogida está investigación en un libro titulado Vida después de la vida, publicado con documentación científica que en sus años como cirujano en el hospital investigó a cientos de pacientes que encontraron o tuvieron un experiencia cercana a la muerte ( ECM ) con la tecnología y personal cualificado de doctores, científicos, psiquiatra y cirujanos en la medicina legal.
Mi mujer puso mucho empeño en el diálogo con el entrevistador. Yo la verdad no mucho, y exclamé ! ¡Ya era hora que la ciencia lo difame! Ya que desde que tengo uso de razón intuía que después de la muerte tenía que haber algo más, no me creía que durante el tiempo que estamos aquí ¿Vivo? en este Mundo desaparezcamos todos en un nicho o bajo tierra, no era recíproco, en sobrevivir, subsistir, aprender, amar en habitar esta sociedad y vivir experiencias únicas agradable como desagradable acabando comido por la putrefacción.
Todo esté tinglado alguien tuvo que crearlo con un único fin, además en la liturgia cristiana, creen en la resurrección de los muertos.
Otras religiones en la reencarnación, en otras formas de vida animal.
Eso es menos creíble, dijo ella, ¿cuando desaparece el cuerpo como pueden resucitar?, ¿como zombis?, dijo ella.
Pues no lo sé como sería, lo único que sé, es que mi padre me contó, que su padre se le aparecía en su habitación muy a menudo, hasta que por miedo, mi abuela se lo llevaba para su alcoba, ya que tenían mucho pánico y nadie le creía, hasta que una noche en la habitación, su madre se despertó por el ruido producido al caer una caja de zapatos, llena de gusanos de seda, colocada en el ancho del alféizar, y desde ese día ya no se le apareció jamás, lo hacía en forma de gato, y le dio el mensaje de unos papeles estaban en tal sitio, esos documentos eran los necesarios para que su madre cobrará la pensión de viudedad, los buscaron, y rebuscaron por todo los rincones de la casa sin aparecer, hasta que mi padre un niño de diez años les dijo que buscara en otro pueblo donde su padre estaba destinado. Yo siempre le creí, y no creo que fuese una inversión de niño protagonista, aparte en aquella época, estás personas sensitivas callaban sus experiencias, más bien por temor a que te tomarán por imbéciles en una época atrasada donde se premia el cielo prometido de una religión muy ortodoxa y un ejército defensores a espada en una continuada cruzada medieval del siglo veinte.
Pasaron los años, mi pareja perdió muy pronto a su padre.
Recién casado en la nueva casa en los años noventa, una época donde me levantaba sobre las cinco de la mañana para ir al tajo, una de esas mañana después de irme a principio de los años noventa unos meses después de la desaparición de su progenitor, escuchó un ruido se despertó creyendo que todavía estaba yo en casa y me lo aseguró, después en mi llegada al domicilio de una larga jornada, que vio a su padre en la puerta, de pie flotando y vestido de blanco, diciéndole que estaba bien que no se preocupara por él ya que donde estaba, era un ser de principal, mi mujer empezó a tener un miedo, escalofríos, desapareciendo la visión, se esfumó la imagen, le llamó la atención que la comunicación nunca fue verbal sino más bien en pensamiento.
Todo esto me lo contó y deducimos que podría ser un sueño, en ese mismo año su hermana le comentó también su encuentro en sueños con su padre y el olor agradable que dejaba en la habitación una vez desaparecido.
Entonces le comente yo mi experiencia meses después, que me desperté en la noche vi como una figura se desvanecía en el momento al deja una estela de un olor muy agradable durando un instante, que no me dió tiempo en saborear su exquisita fragancia, luego mi olfato comparó el aroma con la flores de la Dama de Noche, que deja su esencia en madrugada veraniegas con las brisas del mar como telón de fondo, cómo pude comprobar en la década de los ochenta en mi estancia en la Costa del Sol.
Recuerdo que está experiencia se lo comenté a mi compañero Rafael, que alardeaba de ser muy sensitivo y podía viajar a otros mundos, era un consumidor de marihuana quizá sea este el motivo de sus fantasías estelares.
Me decía que no tuviese miedo al comentarle mis experiencia con la visión y la fragancia.
Asegurándose que me visitó la Virgen, hombre me alegra que alguien bueno vele por mí, y le relató las experiencia que en ese momento no sabía cómo se llamaba científicamente, y que pasaba un miedo atroz viendo sombras incluso una de ellas me quiso hacer daño sin que mi cuerpo respondiera, como si estuviese paralizado totalmente, y lo único que podía hacer es llamar a mi compañera por su nombre, pero salía fuerte bramidos de terror de mi labios, asustando a quien en esos momentos dormía, tan solo se acababa con este suplicio rezando, Rafael me dijo que así era los viajes astrales, que me dejara llevar que al principio era de miedo, ¡uno cojones le respondí!, lo que tú cuenta en tus excursiones estelares para nada tiene que ver con lo que a mí me está ocurriendo.
En el dos mil dieciocho mi hijo vino a nuestra habitación y nos dijo que lo que me pasaba, tras una noche infernal, se la conoce como Parálisis del sueño, y a él le pasa de vez en cuando y tiene una explicación científica en Youtube pudimos ver experiencias grabadas con personas que tenía este tipo patología y alucinaba.
Por fin pude ver en mis carnes una solución a este trastorno que me lleva ocurriendo desde los años ochenta, que yo le achacaba en sus consecuencias a la ingestas de bebidas alcohólicas.
Entonces una vez aclarado este fenómeno fantasmal, el domingo muy pesar mío, mi compañera me convenció en ver cuarto milenio era a principio del año 2025, Iker Jiménez entrevistaba otra vez al Doctor Segarra, pusimos más interés que la última vez, la verdad nos cautivó mucho al decir que la experiencia cercana a la muerte, estaba investigando con testimonios reales de personas que la sufrieron en su hospital y con la participación de otros expertos facultativos en diferentes especialidades como neurología, psicología y otras.
Al día siguiente mi mujer entablaba conversación con su amiga Cecilia, comentando el programa y diciendo que estaba terminando de leer su libro, una vez terminado se lo pasaría a ella.
A mitad de la semana mi mujer me dijo que según este doctor, está experiencia con la que túbo con su padre se dan cuando la persona está casi muerta o alcanzado esos niveles, y se extrañó, pero yo no tuve ninguna sensación de armonía ni recuerdo cuando me estaba al borde de la muerte, en 1994 después del parto, no sentía nada. Le dije que me dejara el libro para leerlo, y ella me comentó que no lo iba a entender porque estaba escrito con un vocabulario muy científico. Así que se lo devolvió a Cecilia, y yo me fui al día siguiente a la biblioteca Dulce Chacón, ahora mismo este libro está prestado, en cuanto lo devuelvan te llamamos y tienes tres días hábiles para recogerlo, dijo la encargada. Mientras tanto me recordaba los meses siguientes a la muerte de mi suegro, cuando mi suegra no levantaba cabeza ante el repentino fallecimiento de su marido. Un domingo que estábamos toda la familia a su alrededor consolándola, se presentaron un amigo de mi cuñado viudo con una cinta de video de un reportaje de testimonios de personas que tuvieron un ECM, para darle esperanza a la viuda y que yo me empape con esas vivencias y ojalá dije que fueran cierta, pero todavía no se han demostrado científicamente tan solo sabemos lo que nos cuentan alguna reflexiones testimoniales de protagonista religiosos, que seguramente están tergiversados por los descendientes de esos protagonistas bíblicos.
Ojalá que por fin se pudiera demostrar y decir a los cuatro vientos, Señores si hay vida después de la muerte, la muerte es un puente para cruzar este abismo del miedo a la desaparición del óbito y del ser, para sustituir en otros mundos, moradas o dimensiones en otro plano, y aquí solo estamos para acotar ese camino para llegar hacia el AmoR verdadero, pero Señores esto se tiene que ganar amando y trabajando para la armonía y la Paz mundial sin ánimo de lucro.
Ya que nos unen más en el cariño de las personas que el odio acumulado en este pequeño periodo de existencia.
Recibo un mensaje otra vez de mi celular, el día seis de marzo de 2025, ya está disponible el libro la Super conciencia existe vida después de la muerte.
Al medio día me pasó por la biblioteca, me apropió del libro y empiezo a leerlo, y lo voy entendiendo aunque mi mujer me decía que estaba escrito con palabras técnicas. Y me va gustando tanto que decidí una vez terminado volver otra vez a la biblioteca y pedir el libro de 1975 de Raymond a Moody, vida después de la vida. Aunque lo conocía desde hace años jamás pensé en leerlo, solo me animó ver el documental que nos puso el amigo de mi cuñado y sobre todo al terminar de leer el libro del Doctor Segarra.
Aunque yo ya intuía lo que pasaba después del fallecimiento, A Veces que te preguntas, ¿algo más tiene que haber con la muerte, no es normal que el que inventó o creó este tinglado de la vida, acabase tan triste, está realidad?, aunque científicamente nos enseñan, que nacemos, crecemos, aprendemos a sobrevivir, no reproducimos para después desaparecer en este mundo. Yo me canse de buscar explicaciones, la vida debe de ser para vivirla y no inventar teorías, que nos puedan retrasar en llegar a otra conciencia más espiritual, como cuando descubrí en un libro -Cuento allá por los años ochentas buscando cualquier información sobre la existencia de la vida extraterrestre.
Y me ayudó a comprender García a este libro, las personas que abandonan este mundo, según su evolución en él y su comportamiento, pueden llegar a nacer en otros mundos menos evolucionado o más progresado, según la medida alcanzada en esta vida e incluso les tocaría nacer en algún animal. Me acordaba de lo que me contaba mi padre con la presencia de un gato que se hacía encarnar con la de su padre.
Me gustó tanto esos dos libros, que los quise conservar pero se perdieron, quizá a mediados de los noventa por el cambio de barrio, con mudanza hacia el nuevo piso, lo rebusque y me desilusiones al no encontrarlo. En septiembre del dos mil veinticuatro quedamos con nuestros amigos Cecilia y Fermín, a su mujer le hable de estos libros que están en biblioteca, por si lo querías leer, ya que ella, también busca de cualquier explicación sobre este tema, atrás vez también con el yoga la espiritualidad y de respuesta de esta compleja supra conciencia de la existencias de la vida después de la muerte, les dije los títulos el primero era Ami el niño de las estrellas y Ami Regresa.
Y Fermín que también es una persona sensitiva, me preguntó si yo también lo creía, ¿si no existían pruebas de esas existencias?. Recuerdo que le dije que en esta vida debemos aprender, como en la época del colegio, un niño de párvulo o primaria no puede pasar directamente al Bachiller o la Universidad, se volvería loco a no comprender ese nivel y se quedaría estancado en la evolución, por eso la vida es como esos años de cursos desde párvulo donde vamos averiguando y comprendiendo cada vez con más razonamiento de nuestra etapa, y lo que no lo superen o no aprenden, tiene que repetir, por eso el hombre busca una fórmula para ser inmortal, pero la inmortalidad es la del espíritu o el Alma, que se desprende de su pesado, inservible en cuerpo o vehículo, que ya no le hace falta para el siguiente curso.
Yo también creo que algo así como tú lo describe, me dijo Fermín y seguimos tomando cerveza en la terraza del bar de aquel sábado de septiembre, se terminó nuestra velada a ser interrumpida por una llamada telefónica de su hija, reclamando de ellos.
Y el lunes al mediodía día me acerqué otra vez a la biblioteca Dulce Chacón, para recoger la entrega del libro de Raymond Moody, y encargar otro nuevo de esta saga de la búsqueda de la vida después de la vida, recuerdo que la bibliotecaria me preguntó, ya que los movimientos en la ficha de estos libros para prestar aumentó sus salidas y entrada en tiempo muy cortos, le conté todo el proceso por la intervención del año pasado del Doctor Segarra en un programa de televisión y demostrando científicamente que la vida después de la vida, pudiese existir, lo cual la señorita le despertó su curiosidad, y me insinuó que también ella lo leería. Y me apunto para pedir el libro cuando lo devolviese el otro lector, que finaliza dentro de quince días y apunto en mi ficha el autor: el Psiquiatra Forense D. José Miguel Gaona y el título: Al otro lado del Túnel. Una vez terminado de su lectura, me acerqué otra vez a la biblioteca y está vez encargué los libros de Enrique Barrios, Ami el niño de la estrella y Ami regresa, el archivero lo tenía anonadado, ya que los libros los devolvía para su dependencia en los cincos días siguientes, y a empezar con una nueva saga, desconocida por ella les dije que eran unos libros que yo los tenían en los años ochentas y los perdí, su contenido es de un niño extraterrestre que viene a la tierra para encontrarse con Pedrito un niño que cada tarde noche se sienta en una roca al lado del mar para consolarse de su pronta marcha a la ciudad, ya que sus vacaciones en el pueblo van terminando, y es una de las mejores teorías que leí sobre la existencia de los extraterrestres.
La vi tan aplicada en el resumen de los cuentos, que no me extrañaría que ella lo leyera una vez yo lo hubiera entregado, ya que la narrativa era corta y amena de esa aventura de un niño de la tierra y otro de otro mundo a miles de kilómetros año luz.
Una vez leído los dos unidades, me enteré que había un tercero la continuidad de la aventura de Pedrito y su amada Vinka su alma gemela espiritualmente hablando y lo empecé a leer toda la saga durante el mes de Mayo de 2025, este último cuento Civilizaciones Internas, al leer su página, la casualidad me llevó a comprender aquel episodio ocurrido en aquella noche de mediados años noventa, con la silueta de esa oscura figura, que dejó tras de sí una estela de su dispersión de aquel agradable perfume que duró una milésima de segundo en la habitación hasta desaparecer el olor, y cómo aprendí del segundo libro nada es casualidad, lo causal ocurre por algunas circunstancias, y al llegar a este punto, me pregunté mucha veces qué finalidad tuvo aquel imprevisto.
Cuando en el capítulo de la Tercera parte viajan en el Ovni de Ami, Pedrito y Vinka viajan a un mundo donde entra como en un parque temático de seres de otro mundo, que son proyecciones tan reales como los habitantes de soles envueltos en llamas, al quedar los dos niños atónitos y con miedo a ser devorados por las llamadas, el extraterrestre les sacó de su asombro explicado que eran una proyección.
Los niños se sintieron confuso, y el extraterrestre le mostró como en el universo se encuentra otros seres que llamándoles aunque estén en otra dimensión o mundo años luz se materializan en este lugar donde es requerido, sin vehículos espaciales para trasladarse, concentrándose los tres y llamando a su amigo estelar, el duende si así se podría llamar se materializó dentro del platillo volante, saludando y conservando y ala hora de irse se esfumó como desaparece un conejo dentro de la chistera del mago, dejando una agradable aroma envuelta en la nave espacial.
El niño de las estrellas le comunico que alguna vez ellos realizarán este portentoso milagro después de culminar sus misiones en la tierra y en Kia, el mundo de Vinka y comprender el AmoR verdadero y su espiritual posteriormente de vivir y morir varias veces, hasta llegar a esa conciencia.
Es curioso como cualquier libro que lees, siempre encuentras una respuesta a tu pregunta o sucesos de acontecimiento pasado, presente o futuro, mi antiguo jefe decía que la casualidad no existe, pero seguro que no sabía que todo es casual y tiene una funcionalidad, está, por ejemplo en que los libros que llegaron hacia mí, me abrió la mente a comprender que el miedo te puede equivocar de camino hacia la verdadera meta. El AmoR es totalmente infinito y no acaba con la desaparición del viejo cuerpo bajo tierra o pasto de la incineración.
Han Solo para el País de la Piel de Toro.
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