A-marte

He hecho cada cosa por demostrarle mi amor, no acostumbro mucho a decir lo que siento ni para bien ni para mal, pero le he dicho mil veces que lo amo, es un sentimiento difícil de expresar  y por eso he decidido demostrarle con hechos lo que siento.

-Cada mañana le hago el café como le gusta, no tan aguado ni tan espeso, un toque de sacarina pero que no sea muy dulce ni muy amargo, así es el,   ni tanto ni tan poco , suele ser impredecible y no logro nunca pillarle, cuando quiere amor soy bastante distante, pero cuando no lo quiere me dan ganas de abrazarle,  cuando quiere algo siempre le doy lo contrario.

Creo que por eso nos gustamos, le gusta mi lado sumiso pero ama mi lado rebelde, entiende bien el sentimiento de amar sin poseer, me deja que sea libre aun estando a su lado, me prepara las alas si quiero volar y va conmigo a mi lado.

Y yo entiendo de amor cada que dormir le veo, observando sus lunares para mi es un plan perfecto.

Hoy me ha dicho que le gustaría que le amara como el quisiera que lo hiciese, y al explicarme como quisiese que le quiera, veo que es una forma mucho mas sencilla que lo que hago, tendría que esforzarme 0 para hacerlo así, así que empecé a hacer el café sin pensar en el punto medio que tanto pensaba que le gustaba , deje de colgar sus camisas para que no se arrugasen , deje de mostrar interés en pequeños detalles, así pasaron los días. 

y las cosas marchaban igual, estaba muy ocupado para  notar que ya no me esforzaba tanto en hacerlo en su punto, luego deje de ponerle sacarina, pero bueno pasaron los días y supongo que tampoco lo noto, la prisa del trabajo no le dejaba notar que ya no hacia esas cosas que tanto le gustaban o las que pensaba yo que le gustaban.

-Siguieron pasando los días, ya no calentaba el café, al final frio también podría estar rico, que mas da.

Hasta que llego el día que ya no hice el café, y ese día si lo noto.

Lo que para mi ya me importaba una mierda todo, me había cansado de intentar quererle de una manera que para mi era la mas bonita de dejarle saber que lo amaba, y al punto que nuestro amor se enfrió como el café, y sin mas razón dejo de existir por a-marte a tu Manera.