Nos ha dejado el maestro,
se ha marchado el poeta,
el articulista, el novelista,
el dramaturgo, el guionista.
Nos ha dejado ese ser humano
que tanto amaba el arte,
que adoraba la vida,
que tan bien escribía.
Sabía mostrar los sentimientos
creando mundos de fantasía,
escenarios de alegría
con perfumes de nostalgia.
Antonio era su nombre,
Gala su apellido,
un reconocido escritor
que seguirá siempre vivo.
No me dejes morir de lo vivido,
no me dejes vivir de la amargura,
eso decía y así lo escribía.
con amor y con ternura.
Era un ser muy elegante,
que desprendía sabiduría,
regalándonos sueños, risas, llantos,
viajando en el tiempo y en el espacio.
Temo girar la vista y no verte,
gritar tu nombre y no nombrarte,
esos versos que tú escribías,
esencia pura de tu arte.
Has levantado tu vuelo,
se ha terminado aquí tu historia,
pero tu pluma seguirá haciendo trazos,
pintando en el cielo muchos lazos.
Nos has dejado tu obra,
tú nunca dirías «todo termina»
seguro que dirías:
«sonríe alma y comencemos»
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