Entonces lo supe.
Es él.
Le dije; «pedazo de mierda, hijo de la gran puta, o me quieres o me dejas».
Y me dejó.
Entonces desde ese día me juré darle muerte a ese amor retorcido y dañino.
Asi fue y hoy me ven en búsqueda. No, no en búsqueda del amor.
En búsqueda de nueva inspiración, más allá del amor o eso que yo creí fue amor.
….
Pero de qué me hablas, estamos felizmente casados.
…
De verdad, ¿Lo estamos? ¿De verdad?
OPINIONES Y COMENTARIOS