Los pensamientos inundan mi mente. «¿Me amó?» «¿De verdad lo hizo?» «O solamente me quiso». Eso y más, me taladran la cabeza, intentando llenar el hueco que nada llena, intentando vaciar un lugar más de mi cabeza para buscar con qué llenarlo.
Los pensamientos inundan mi mente, ¿cuántos malditos pensamientos más pueden llegar a mi cabeza? No sé, pero espero que ninguno más, pues ya estoy harto de todos ellos.
Los pensamientos inundan mi mente y ni yo sé qué siento y siento que lo que siento no es correcto, pero aun así hago otro intento y fallo, otra vez, en el intento.
Los pensamientos inundan mi mente y ya no duermo ni aunque lo intente; nada apaga mi mente, que está siempre atenta a ver quién pasa por mi puerta o quién se sienta a mi lado en el bus, o quién me escribe, aunque solo sean las notificaciones de YouTube.
Los pensamientos inundan mi mente y ya nada vale la pena. He intentado venderla pero como no sé cuánto vale mi pena, solamente la comparto aunque ni me guste ese trato, el que hice conmigo mismo hace mucho, el de «mantén la cabeza en alto» y a pesar de eso… siempre mirando al suelo.
Los pensamientos inundan mi mente; los que me mantuvieron vivo por mucho tiempo, ahora solo logran hacer que me quiera matar.
Pero supongo que así soy y que siempre… Los pensamientos inundarán mi mente.
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