POR LA VEREDA.

Algunas preguntas no tienen solo una respuesta,

Es como el andar en el mundo,

Peligroso, los nidos de víboras,

Las manos abiertas de los traidores, las fauces de las ideologías,

El titilar de las lágrimas de las amadas,

La ternura de las cunas colmadas de esperanzas,

repleta de resguardos.

aquí esperando el despertar de esta generación,

Sin pudor,

con ganas de tener todos y no saber del sabor del sudor carcomiendo los ojos,

del café frio,

de la fragilidad de la vida en las manos de los imbéciles,

De una bala perdida,

Agrediendo,

quitándote el miedo con licor y pastillas,

Hay una poesía en esto, la tragedia de vivirlo.

No soy crítica,

abriendo los márgenes de las posibilidades,

dar pasos de cambio,

En las cosas que no dejan que cambien

en las miradas y las manos de los que son dueños de los cambios,

es hora de desobedecer

es tiempo de aprender a sembrar, no ideas añejas,

sino granos propios de le generación en eclosión,

de aplastar la estupidez, y entenderte, quererte,

contenerte.

Acompañarte a dar tus pasos temblorosos y apretar tu mano de joven,

Y mirarte crecer, ser aporte,

más que cifras de regordetes simplones en la tv,

que venden las mentiras de los que nos consumieron la vida,

no sea parte de eso.

La libertad tiene sus costos,

La tinta en mis tinteros se agoto como el aire en los pulmones,

No reprimas nada, no te límites de nada, hay muchos santos en los cementerios.

Vive solo con respeto a los demás y a los ciclos de la naturaleza,

pues esta te dirá claramente cuando estés errado,

Confía en las mariposas,

en los caminos laboriosos de las hormigas,

En dulce zumbido de las abejas enamorando a las flores,

Confía en ti.