te compré flores

no sé si fue la nostalgia o el profundo sentimiento de que se acerca tu cumpleaños

quizá es la colorida marea que se asomó el 21 de septiembre, o quizá es el inútil deseo de un pobre antiguo romántico

El hecho es que te compré flores.

Las elegí como niño que elige su mejor regalo

y hasta te escribí una pequeña carta,

una carta que, con solo dos renglones, traza la historia de nuestro camino y te invita a que lo recuerdes, con el sentimiento que quieras, pero que lo recuerdes

Una carta que te invitaba a volver a creer en el amor, a abrirte nuevos caminos y dejarte llevar por el olor que irrumpe en esta época del año… 

 que hermosa época para amar.

La nostalgia cada vez se hacía más profunda

Salí de mi casa en un horario en el que no tenía ni idea si ibas a estar, el tiempo se llevó consigo la noción de tus días

Me tomé el colectivo que siempre me tomaba para ir a tu casa, un poco deseé que el chofer me reconociera pero difícil. después de tanto tiempo.

La nostalgia crecía mientras el camino se me hacia familiar y los ruidos de la calle me traían recuerdos infinitos

Llegar a tu puerta fue la tarea más sencilla de estos últimos meses. Como si el cuerpo tuviese memoria..un poco siento que el viento me ayudó a no tirarme atrás.

Te voy a ser sincero, el tiempo se llevó consigo muchas cosas y entre ellas el número de tu timbre. Casi me desplomo por no poder recordarlo.. aún no puedo.

Entre dudas y nostalgia un ángel cayó a darme una mano; como si el universo hubiera planeado este instante a la perfección para que nada fallara

Tu portero reconoció mis ojos tristes, y hasta un poco se alegró de verme. Creía que no me iba a ver nunca más, mas yo sabía que nos íbamos a volver a encontrar

Me saludó sonriendo y al ver el enorme ramo de flores se imaginó el camino que había emprendido.

Sin dudarlo te llama.

Por un pequeño instante desee que estés fuera, que del otro lado del teléfono me encuentre con un silencio eterno.. esperé una señal para salir corriendo

Pero no fue asi

El tono alto de tu voz se escuchó del otro lado, completamente sorprendido y hasta un poco asustado

Siento que no tardaste mucho en bajar, siempre recuerdo que tu ascensor tardaba mucho y aunque así lo sentí, en un abrir y cerrar de ojos te apareciste como fantasma

La luz de tus ojos es algo que no me voy a olvidar jamás, es una de las pocas cosas que el tiempo no se pudo llevar.

Siento que la conclusión evidente era rendirnos en un beso y juntos caminar, pero algo dentro de mi comenzó a fallar

Abrir mis ojos fue la mayor condena que pude sentir

Ver mi cama vacía y al amanecer surgir

El sentimiento de desesperanza creció, junto con la nostalgia ocuparon todo mi sentir

Corro a mi teléfono para buscar tu mensaje de agradecimiento pero al abrirlo veo tu ultimo mensaje

Tus últimas palabras de despedida, otra cosa que el viento no se pudo llevar.

Una noche más de ira, una noche más con batalla perdida

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