El Diario de Pandora: Tercer episodio

El Diario de Pandora: Tercer episodio

31 de Marzo del 2017

Querido Diario:

A pesar de que el día esta hermoso y muy agradable, no tengo ganas de levantarme, quiero seguir durmiendo a pierna suelta, quedarme por toda la mañana en mi cama.

Pero Dany no acepta eso, me sacude tratando de levantarme que hasta me jala la sabana con tal de que despierte, por lo cual me levanto un poco fastidiada, pero no me puedo molestar con ella, no se si es porque tiene razón al levantarme o porque es tan adorable que simplemente se me van las ganas de hacerle un berrinche.

Justamente al levantarme, la «señorita» Deysi me dice que después de lavarme los dientes y tomar desayuno, vaya con Dany a su oficina porque quería hablarnos de un importante asunto, la verdad no es que interese tanto, pero por la cara que tenia, debe ser algo muy importante.

Dany y yo nos dirigimos a su oficina después del delicioso desayuno, la oficina no es tan grande ni tan chica, esta muy bien arreglada y tiene hermosos muebles donde es más cómodo dormir que en nuestra propia cama.

-Esto que les voy a decir es algo muy importante- Empezó la «señorita» Deysi- Ustedes están a punto de terminar la secundaria y como yo personalmente me estoy encargando de ustedes, quiero llevarlas a una charla vocacional que esta por aquí cerca y luego nos iremos al centro comercial. ¿Quieren ir?

Con la cara de emoción de Dany y la mía de asombro, la «señorita» se había dado cuenta que la pregunta estaba de más.

– Entonces vayan a cambiarse y yo las esperare en el patio- sentencio la «señorita».

Como si fuéramos el «corre caminos», Dany y yo nos alistamos y fuimos hacia el patio de donde saldríamos hasta la salida, en donde nos esperaba un taxi para ir.

El lugar donde era la charla era muy acogedora, aunque ver a chicos y chicas de 17 hasta 20 años, hacia que Dany y yo nos sintiéramos como unas niñas de kinder en una sala de universidad.

A pesar del lugar, la charla no era tan «motivadora» la verdad, fue un poco más alentador saber que podía ser lo que yo quisiera en realidad, y se lo que quiero ser, una cantante.

Después de la charla, entramos a otro espacio en donde servían diferentes bocaditos y deliciosas bebidas, la «señorita» nos dijo que nos quedáramos un momento mientras iba a hablar con un señor, Dany asintió con la cabeza que obedecería, en cambio yo solo atine a sonreír.

Como buena «Pandora» que soy, decidí ir a dar un paseo por la sala, Dany se negaba mientras me seguía con la mirada en el lugar donde la «señorita» nos dejo, Dany es también curiosa pero gracias a la frase «La curiosidad mato al gato» se abstiene de hacer caso a su curiosidad.

Entre caminada y caminadas, por lo distraída que estaba, sin querer choque con alguien mientras iba a llevar unas bebidas para mi y para Dany, que según yo, se estará preguntando donde demonios estoy.

– Disculpe…

-No se preocupe, la culpa es mía.

Pero que ven mis ojos, me salí chocando con el chico más lindo de todo el lugar, ojos verdes, cabello castaño, tez blanca y una mirada tierna pero apasionada… pero ¿que estoy diciendo?, discúlpame diario, pero solo tengo ojos para Ángel y nada más.

En chico en mención se llama Alex, se presento con toda la caballerosidad nunca antes vista (en mi caso desde luego), y yo tartamudeando como siempre, tiene 17 años y recién acaba de terminar la secundaria, me dijo que me acompañaría a donde estaba mi amiga y que por ahí buscaría a su amigo que lo había perdido de vista. Para mi sorpresa hallamos a su amigo conversando muy coquetamente con Dany, que solo atinaba a decir unas cuantas silabas mientras se ponía roja como un tomate.

– Oye Gabriel, no asustes a la chica- Decía Alex, en sentido de broma, su amigo es igual de simpático, ojos azules, melena negra y una hermosa mirada.

-Creo que ya es hora de irnos- Le dijo Alex a su amigo- Hay muchas cosas por hacer.

Nos dejaron sus números y sus nombres para que los ubicáramos en facebook, a lo cual solo sonreí y Dany ni palabra (estaba bien roja la pobre), y salimos tratando de ubicar a nuestra tutora, que se nos apareció de repente diciendo que ya era hora de irse al centro comercial y que nos tenia una hermosa sorpresa.

Mientras nos dirigíamos rumbo al centro comercial, la curiosidad me mataba con lo de la sorpresa, contaba los minutos para llegar, hasta que llegamos y nos dirigimos a un centro de informática, estaba confundida, no sabia para que nos dirigimos ahí.Hablo con el señor de la tienda, el cual al reconocerla , entro un momento para salir con dos paquetes el cual no reconocía que eran.

-Chicas, por ser buenas niñas y acompañarme a esta charla sin decir una sola palabra de desacuerdo, les entrego esto como muestra de mi apoyo hacia lo que ustedes quieran ser- Dijo nuestra tutora mientras nos entregaba un paquete a cada una.

Increíble fue nuestra sorpresa que al abrir el paquete, nos encontramos un celular ¡Para cada una!, hasta ahora sigo sin creérmelo. Claro que contentas y felices le dimos las gracias por el regalo, a lo cual ella solo dijo «Se lo ganaron».

Como que estoy empezando a creer que nuestra tutora no es tan mala después de todo.

Luego lo demás es historia, nos fuimos a comer a un restaurante y después a comer helado para luego dirigirnos al orfanato, contentas y felices.

Ahora que ya es de noche, decidí hablar con Dios y darle las gracias por este maravilloso día, conocí amigos, me regalaron un celular, tengo más claridad sobre lo que quiero ser y gracias por tener a Dany a mi lado feliz al igual que yo por esta agradable experiencia. Gracias por escucharme.

Buenas Noches.

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