La compañía no deseada para tomar café 
En la quietud de mi día , el mal hábito de cuestionar mi existencia y propósito se aferra a mí, sembrando el caos en mis pensamientos. Una presencia inquietante perturba mi paz interior, haciendo que a veces olvide incluso cómo respirar, mientras mis sentidos se agudizan en busca de algo que se escapa de entre mis manos. Mis pensamientos se convierten en un eco ensordecedor, repitiendo preguntas sin respuesta, y me veo atrapada en un bucle de auto examen constante. En medio de esta lucha interna, me siento descontrolada, como una hoja arrastrada por el viento, desconectada de mí misma y perdida en un mar de dudas sobre quién soy y cuál es mi lugar en el mundo.
club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja
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