Se dice que el valiente vive hasta que el cobarde quiere. Algo completamente falso, porque el cobarde siempre será cobarde y el valiente nunca será de mal proceder.

No se considera valentía ejercer fuerza o poder (control – dominio) sobre el más débil o necesitado, esto es maldad.

Valiente es todo aquel que no mira los obstáculos o impedimentos qué se presenten en su camino, sino las metas que tiene delante de si.

Valiente es el que se esfuerza por alcanzar lo que a los ojos de otros parece imposible.

El valiente marcha firme hacia adelante con fe y seguridad hasta alcanzar la victoria, el cobarde siempre haya excusas y pretextos para no enfrentar las adversidades, porque se detiene a mirar la altura de las montañas que se levantan en su contra por eso no recibe gloria.

En cualquier meta o propósito siempre está presente el sacrificio y el esfuerzo, pero en esto consiste la valentía en resistir y mantenerse firme hasta el final.

Recordemos que también el reino de los cielos solo los valientes lo arrebatan, y que para recibir la corona de vida es necesario ser fiel hasta la muerte.

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