Alma Resonante

Como no pensar en las mañanas cuando tu voz dulce acariciaba las entrañas de mi ser, cuando al hacerte el amor me mirabas con el fervor de amarnos para siempre, es triste el saber como la vida se encarga de ponernos en mismos caminos pero distintos destinos, a través de esté gran viaje que nos encamina en senderos frondosos, no logro comprender el porque damos con personas tan maravillosamente destruidas por un pasado infernal.

Es feo darse cuenta como llegamos a ser tan reemplazables a través de la decadencia del tiempo, no logro comprender por qué ya no logró sentir tu presencia en mis pensamientos, en mis acciones y en mi vivir diario, no quise alejarme de tus aposentos ni mucho menos pretender que fuéramos un para siempre… si por siempre hubiéramos intentado mejorar lo que nos destruyó, quise creer que éramos un equipo pero al final me di cuenta que eras mi rival, duele ver como somos una loca evolución dialéctica de Hegel donde cada síntesis renuncia a un punto y empieza el otro, como un ciclo sin fin en un lugar donde batallamos una guerra entre nosotros sin sentido, ahora, sin sabor me encuentro tratando de hallar la respuesta del porque aunque te amo ya no quiero verte, no quiero saber de tus hermosos ojos, tu sonrisa tierna y tu ferviente amor, solo quiero abandonarme en los brazos de la soledad de mi cuarto, esperando que algún día la vida me de la sorpresa de haberte esperado sentado en el viejo sillón de mi paciencia, donde te darás cuenta el porque decidí dejarte a la intemperie del mundo, guardando la esperanza de que entiendas lo mucho que amé tu resonante alma…