Cuánto ME AMO

Cuánto

ME AMO

P.S.M

Alguna vez te has preguntado ¿Cuánto me amo?. Siempre esperamos recibir amor de quienes nos rodean, buscamos la aprobación y la aceptación de los demás, nos esforzamos por complacer parámetros inculcados por dogmas, por descendencias, por prototipos y, adormecemos nuestro YO interior. Lo callamos y amordazamos, le ponemos una venda oscura un velo espeso de culpas, de conciencias erradas.

Los diseñadores de moda colocan estándares de hombres y mujeres delgados, de finas curvas porque según ellos eso es “estética”. Hombres y mujeres llevados al extremo de alimentarse casi que de suspiros, horas y horas en gimnasios, dietas y dietas, ingesta de bebidas dizque energizantes y calóricas solo para complacer el mercado de la moda.

Pero así mismo, engañamos nuestro cerebro consumiendo alimentos nada nutritivos y que sólo nos van acercando más rápido a la tumba. Nos metieron casi que a la fuerza la errónea idea que una persona robusta y con sobre pesos era sinónimo de salud. Todos los extremos son perjudiciales. O nos matamos de hambre para parecer a la icónica Barbie y su amado Ken o nos envenenamos con comidas chatarra llevándonos a ser modelos del famoso pintor colombiano Fernando Botero.

Pero quién al mirarse al espejo se dice a si mismo que bello o bella estás, quien se a tomado el tiempo de decirse a si mismo cuanto se ama. Sólo nos paramos frente al espejo y criticamos el ser de ojos negros y no azules, por tener un cabello rizado y no liso, por ser de tez morena y no blanca, porque no tenemos unos centímetros más para que nos dejen de decir ( de forma irónica ) enano.

Nos sentimos inconformes y no agradecidos con lo que somos y como somos. Siempre queremos imitar figuras de plástico, con abdomen tallado, con curvas pronunciadas. Pero muchas veces esos figurines son sólo eso, con un cabello pintado, el que es lacio se lo riza, el que tiene cabello corto se pone extensiones, los hombres pasan horas levantando pesas para mantener una figura atractiva pero sus bocas salivan cuando su cerebro les pide a gritos un trozo de pizza. Mujeres inconformes se ponen pestañas postizas porque no valoran las que la naturaleza les dio. Extienden sus uñas porque esa es la moda lastimando y dañando con químicos las que por creación natural les fue dada.

Vamos formando niños y niñas encaminadas a la superficialidad del mundo, pero el ejemplo que es y debería ser el mejor maestro está siendo puesto en un último lugar. Amarnos no es tener una figura esbelta, amarnos es alimentarnos correctamente proporcionando a nuestro cuerpo como templo sagrado los nutrientes que necesita para su correcta función.

Amarnos es aceptarnos tal cual somos, altos, bajos, con cicatrices, con estrías, con poco o mucho cabello. Amarnos es no permitir que nadie nos pisotee nuestra dignidad y nos compre la conciencia, amarnos es respetar nuestras convicciones y actuar de acuerdo a ellas. Amarnos es no permitir bajo ninguna circunstancia que otro u otra insulte nuestra apariencia física.

Amarnos a nosotros mismos es reírnos de nuestros defectos porque de esta forma dejamos desarmados a los que pretenden hacer de nosotros el chiste y la broma del momento para así disimular la estupidez que brota de su humanidad. Amarnos es aceptar que soy único e irrepetible y que en el mundo habrá alguien mejor o peor que nosotros pero no igual, amarnos es saber que siempre habrá alguien dispuesto a darlo todo por conquistar nuestro corazón. Amarnos es reconocer en el otro una parte de la divinidad del creador, amarnos es hacer respetar nuestras posturas sin sobreponerlas por  sobre las de los demás.

Amarnos nada tiene que ver con parecernos a la actriz de Hollywood, amarnos es saber que también podemos llegar a la cima de nuestros sueños. Amarnos es valorar nuestros propios esfuerzos y los pequeños logros. Amarnos es abrazarnos cuando todos nos han dado la espalda, amarnos es escuchar la voz de nuestro Yo interior diciéndonos “ ánimo, tu puedes con esto y mucho más”. Amarnos es levantarnos cuando nos hemos tropezado con las piedras del camino y tener la entereza de sacudir el polvo, levantar la frente, secar las lágrimas y volver a emprender la marcha.

Amarnos es dejar de lado todo aquello que lastima nuestro ser, amarnos es no permitir que nos hagan sentir menos de lo que somos, por como pensamos o vestimos, así como tampoco creernos más de lo que es aquel o aquella. Amarnos es ser capaces de brindarnos una sonrisa y decir aunque todo va mal yo estoy bien. Amarnos es dejar de ser lo que no somos sólo para encajar en la sociedad. Amarnos es levantar la voz y decir “NO”,” BASTA YA”, “ NO QUIERO” “YO MEREZCO”.

Cuando aprendamos que esto es amor propio saldrás radiante, verás que la vida es diferente y que el mundo empieza a cambiar a tu favor. No dejes de darte amor cada mañana, ni de darte gracias al anochecer.