Gotita de Luna (cap 13)

(historia disponible en wattpad, booknet y Inkspired)

No volteaba a ver quién era, solo seguía su camino, pues claramente sentía que era un humano y no alguien que conozca.

Del collar de la chica comenzaba a salir bastante cabello y una muy pequeña silueta negra salía del collar.

Mientras que Ita seguía caminando tranquilamente, pues ya sabía que era María saliendo del collar.

María: Un fulano te sigue ¿Lo matamos? -decía María como una pequeña bola de pelo que solo podía ver y escuchar Ita-

Pero sin contestar nada, se desviaba del camino hacia su trabajo y se iba a calles solas y baldías.

Pero al momento de desviarse sentía como el hombre se acercaba agresivamente a ella.

Rápidamente volteaba y miraba que era un chico como de 23 años, que medía 1.76m y que tenía una navaja en la mano derecha

XX: Ya te la sabes güera, saca

Ita: Oh sí, no me hagas nada. Deja te doy todo -decía con un tono sarcástico, metía una mano a su bolsa y sacaba un arma para después apuntarle al chico- Dame la navaja. -le decía seria-

XX: -se sorprendía al ver que la chica sacaba un arma. Sin pensarlo le daba la navaja y levantaba las manos- Disculpa, en serio perdón, no te iba hacer nada. Solo a quitarte el dinero

Ita tomaba la navaja, la guardaba en su bolsa

El chico aprovechaba para intentar quitarle el arma a la chica de las manos, pues pensaba que solo era una chica débil de baja estatura y que iba a ser fácil

Pero la chica reaccionaba antes, golpeaba con el arma fuertemente la cara del chico y aprovechaba a dispararle a la pared que estaba detrás de este.

Haciendo que el chico brincara del susto por aquel disparo.

Ita: por si dudabas que era real. Lo es, y todavía tiene 5 balas más.

María: Ay, pobrecito, -miraba aquel hombre morirse de miedo, sintiendo mucha lástima por él- No parece ser un asesino, no se ve que sea tan malo, preguntarle por qué está robando? -decía aún aquella pequeña bola de cabello colgando del collar-

Ita: -pensaba que María tenía razón, se acercaba al chico que estaba temblando para después darle una cachetada al chico- Esta pendejo o qué? Mijo. ¿Por qué andas haciendo mamadas tan joven? ¿Para la droga o qué?

XX: … -sorprendido por aquella cachetada de la chica, se quedaba unos segundos en shock. Pues se esperaba todo menos eso- Estoy tratando de sacar para la comida de hoy

Ita: Y la de chambear no te la sabes? -decía enojada sin ningún momentos dejarle de apuntar con el arma-

María: Mira sus pecados o entra a su cabeza a ver sus recuerdos para ver si dice la verdad. ¿Qué tal si ocupa ayuda?

Ita suspiraba, pues sentía que la mujer era muy amable, pues si fuera por ella ya le hubiera disparado al chico y ella le hubiera robado a él

XX: Me echaron de la casa, no tengo donde dormir, comer, nadie quiere contratar a un indigente.

mientras que el chico le contaba a Ita su situación, ella miraba que este decía la verdad, pues miraba parte de sus recuerdos que concordaban con su versión de la historia.

Al terminar miraba al sucio chico de pies a cabeza

Ita: Mmm, Pues una bañadita y ya queda, he~. -le decía a María con un tono juguetona, pero lo decía en voz alta-

XX: Disculpa?

Ita: pues si quieres chamba y donde quedarte, ven conmigo -la chica guardaba el arma en su bolsa nuevamente- o si quieres seguir en la calle comiendo sobras, lo entenderé. -decía sin expresión alguna para nuevamente comenzar a caminar a su trabajo-

XX: -sin creer lo que había pasado, pues una chica de 1.60 m lo había regañado, cacheteado y ofrecido trabajo, pero al ver que no tenía opción, sin pensarlo mucho iba tras de ella- Eres hija de algún narco? ¿Me vas a matar y vender mis órganos? ¿me vas a prostituir?

Ita: Mmmm, Algo así, Tal vez y probablemente. ¿Cuál es tu nombre?

XX: Tus respuestas no me dejan tranquilo. ¿Sabes?… Me llamo Judas.

Ita: Ay no mames, ¿como San Judas Tadeo?

Judas: … -pensaba un poco antes de contestar la pregunta, pues era un tema muy personal para él- Mi padre abandonó a mi madre antes de que yo naciera, y cuando nací, mi madre se dio cuenta que fue maldecida con un hijo con la viva imagen de quién la traicionó, desde ese momento me odió con todo su corazón por también ser un traidor. Y por eso mi madre me puso Judas Iscariote, como el hombre que traicionó a Jesús en la biblia

Ita: Qué perra mamada estoy escuchando. Pinche vieja ridícula. Me caga que pongan nombres bíblicos, pinche gente pendeja, sin imaginación o creatividad. Pero contigo se pasaron de verga. -suspiraba frustrada- y pensar que los religiosos son lo más mierda e hipócritas que hay en este asqueroso mundo.

María: -aquella bola de cabello que estaba colgando de collar y solo podía ver y escuchar ita, salía, escalaba hasta el hombro de la chica y ahí se sentaba disfrutando el viaje- Toma en cuenta que el 77.8% de todo México son católicos y sólo el 1.8% ateos. Así que se entiende los nombres bíblicos, pero pobre chico, desde que nació lo despreciaban.

Judas: ¿Por qué tanto odio en tus palabras?

la chica ignoraba la pregunta de Judas y seguía caminando en silencio hasta llegar a aquel club nocturno. Haciendo que Judas se sintiera incómodo en todo el camino y sintiéndose culpable por hacer aquella pregunta.

Judas: La casa de las rosas?! Eres la dueña de este lugar?! -miraba que la chica no reaccionaba aún y solo la seguía como pollito a su gallina-

Al entrar al lugar, aún no había clientes, solo trabajadores limpiando y preparando todo para la apertura.

Las chicas estaban muy concentradas practicando su coreografía que no se daban cuenta que Ita y aquel chico llegaban.

Ita sin saludar o decir nada, pasaba de largo a las chicas y solo llevaba al chico a donde se iba a quedar, se iban a lo que parecía la salida trasera del negocio, sacaba unas llaves, abría la puerta y al hacerlo dejaba ver como había un lindo patio y alrededor unos departamentos que se miraban en remodelación, pues a unos que otros se les notaba que antes eran departamento muy viejos con paredes que se estaban cayendo y agrietadas

Ita: Apenas los estamos remodelando. Pues estaba mejor el callejón de donde te saque que estos departamento cuando recién llegué -decía con un tono enojada al recordar como aquel hombre tenía a las chicas viviendo y sin dejarlas salir- Suerte que tienes que hay unos departamentos disponibles

se acercaba a uno de estos, sacaba las llaves, buscaba la perteneciente de aquel departamento y al abrir dejaba ver aquel lugar algo polvoso.

El lugar no era muy grande, pues al primero entrar había una cama matrimonial, había una pequeña cocina, un baño completo y eso era todo.

Ita: No es mucho pero al menos es un techo, no te cobraré renta, por ahora. Tendrás el salario mínimo y estarás encargado de la limpieza del local. Hay zonas donde no necesitarás limpiar, como el bar o la cocina, porque a los encargados de ahí les gusta limpiar sus áreas y se ponen estrictos si no lo haces bien y no limpias como ellos quieren.

El hombre nervioso, sólo asentía a todo lo que

la chica decía, pues esta estaba sin expresión alguna y parecía hablar en serio.

Aunque aún no se creía lo que estaba pasando.

Ita: Y quiero dejarte muy claro todo esto, Judas. Estás aquí por voluntad propia, así que si no te gusta te puedes ir cuándo quieras. Yo no te forcé a nada. O sí?

Judas: No, claro que no. Fue más mi curiosidad que me trajo aquí.

Ita: Está bien. Pero quiero que entiendas que si te quedas no significa que te voy a dar todo lo que quieras. Tienes que ganarte un mejor puesto y salario. Te estoy dando la oportunidad y las herramientas para que lo logres, si veo que solo me estorbas, te vas. incómoda o toca a mis chicas sin su consentimiento y te mato. ¿Entendiste?

Judas no sabía si tomarla en serio, pues la chica no daba miedo y por su tamaño pequeño le daba ternura, pero al ver el lugar y que la chica tenía un arma, la pensaba un poco más, pues en serio creía que Ita era hija de algún narco o mercenario.

Judas: Sí, entendí.

Ita: Eso espero. En un rato más nos vemos, mientras toma un baño, rasurate y peinate, voy a traerte tu uniforme y ropa para que estés cómodo.

Judas: Sí, está bien. Gracias.

…

Judas: -miraba como la chica salía de la habitación. Pensaba un poco en lo que acababa de pasar, suspiraba frustrado y…- Daisy…

Sacaba una foto arrugada y sucia de su pantalón, donde él salía feliz a un lado de una hermosa chica de cabello oscuro con un filtro de conejitos y corazones. Ambos salían sonriendo en lo que parecía ser una cabina de fotos instantáneas. No parecía ser de hace mucho tiempo pues Judas salía con la misma ropa sucia que tenía actualmente.

Al verla suspiraba nostálgico pero con preocupación

Judas: …No sé en que me acabo de meter. Sé ve que la chica ha de ser de una familia peligrosa y siento que si tengo algún error voy a terminar en un jagüey en bolsa negra.

Trataba de planchar la foto con las manos para después colocarla en un mueble para poder verla siempre

Judas: Se que estarías preocupada, yo también lo estoy, pero ella me está dando la oportunidad de al fin salir de las calles y tener un trabajo fijo, no como todos los temporales que he tenido, los cuales solo me alcanzaba para comprarme algo de comer por una semana o menos

Se quedaba unos segundos en silencio y se sonrojaba al ver detenidamente la foto

Judas: Ya verás, trabajaré para ya ser alguien digno para ti! Ahora yo seré quién te invite un elote!

…

Ita: Pues no suena que es un chico malo y al parecer está enamorado -le susurraba a María-

María: No es bueno espiar -decía algo enojada, pues Ita estaba con la oreja pegada a la puerta del departamento de judas- Y cómo conseguiste este trabajo? señorita? Qué hiciste? -aún sentada en el hombro de Ita con la forma de una bola de cabello-

Ita: -se apartaba de la puerta y comenzaba a dirigirse a dónde ensayan las chicas- Mmm, larga historia, ma’. pero te prometo que llegando a casa te contaré todo. Primero quiero que veas a las chicas, son muy agradables conmigo. También te quiero enseñar mi oficina y—

María: ¿Crees que nací ayer? Me quieres enseñar primero todo lo bueno para que no te regañe tanto, ¿verdad?

Ita: -reía nerviosa y se colocaba un audífono, pues siempre le gustaba tener solo uno puesto por si tenía que atender llamadas tener las manos desocupadas- N-Nooo, solo que—

María: Así déjalo, no empeores más las cosas. Mejor cuéntame, ¿qué es lo que haces?

La chica le iba contando de manera tranquila y algo formal que era lo que hacía, su rol que tomaba en el lugar, pues quería que María ya la viera lo suficientemente madura y responsable para que no la regañase tanto y a lo mejor que se llegara a sentir orgullosa de ella

Ita: Y yo soy la que se queda a cerrar, pero Isabel tie— -la chica al llegar donde estaban las demás en su ensayo, se quedaba deslumbrada por la belleza que irradiaba una de ellas-

Era una hermosa chica de cabello largo, hasta la cadera, de color castaño claro. pestañas largas naturales con unos bellos y grandes ojos brillantes que transmitían alegría y confianza, Y una gran sonrisa con la cuál atrapaba a Ita.

Al parecer la chica estaba platicando con Isabel y parecían llevarse muy bien, aunque la chica no trabaja ahí y era la primera vez que Ita la miraba.

María: Ita? Mija? Tas bien? -volteaba a ver a dónde lo hacía Ita, notando la lo mucho que deslumbraba aquella chica y al darse cuenta de lo que estaba pasando, la mujer se emocionaba mucho- Qué hermosa es presenciar como mi pequeña fue flechada por cupido~

Ita: -se sonrojaba un poco al escuchar lo que decía María- N-No es así, sólo—

Isabel: -al notar que Ita ya había llegado, como ya es de costumbre, la recibía llena de felicidad- Jefa~ -decía emocionada corriendo hasta Ita olvidándose por completo de la chica con quién hablaba, dejándola atrás-

Ita: Hola, Isa -decía como siempre algo indiferente, forzando una sonrisa, pues le costaba reaccionar correctamente ante la gente normal y más a las muestras de afecto. Mientras que miraba como Isabel se divertía pasando el rostro entre sus pechos-

María: -reía llena de ternura al ver aquella escena- Ay mija, debí de sacarte más a pasear, para que aprendieras bien a socializar.

Ita: Lo sé, siempre intento trabajar en ello

decía en voz baja, pero como Isabel la estaba abrazando era obvio que escuchaba lo que había dicho

Isa: ¿En qué? ¿De qué hablas?

Ita: Ah, este, estoy hablando con mi madre por teléfono -reía levemente nerviosa y señalaba al audífonos que tenía puesto-

María: ¿Quién es ella? -decía aún mirando desde el hombro de Ita. y claro, Isabel no podía escuchar lo que decía María-

Ita: Una amiga

Isa: Pero con derechos querrás decir~ -decía traviesa como siempre jugando con Ita- próximamente tu amante~ -acariciaba los gruesos labios de Ita con su dedo índice, sonreía juguetona- Dile que le mando saludos~

María: -se sonrojaba por el trato que Isabel le daba a Ita, pero no decía nada al ver que a Ita no le disgustaba ni incomodaba- que raras se han vuelto las amistades del mismo sexo

Ita: Hablando de amistades… -volteaba a ver nuevamente a la chica que le había robado la atención- …Ella es tu amiga?

Isa: ¿Quién? -volteaba a ver dónde miraba Ita- La mugrosa esa? No, es mi prima. siempre tuvo curiosidad de venir aquí desde que le dije cuánto gano. -miraba a Ita y sonreía traviesa- ¿Por qué? ¿Te gusta?