¿Dónde estás?

Amado mío te extraño, como la noche  extraña al día, como extrañaré la vida después de la muerte; ¡llegó la hora presentante!, estoy sedienta de amor sincero, mi complemento ¿Dónde estás?, te siento cerca pero a la vez lejos, tu presencia rodea mi energía bizarra y me susurra «Ya viene»; y no estás. 

Soy acaso irrisoria e impropia a ti, es mí destino un amor embustero; vivir con este velo negro que no me deja ver, me tortura, me asfixia, estoy ciega en el aquí y en el ahora, hace frio, sé mi abrigo, mi armonía en esta vida, libérame de esta prisión, de está falacia que hoy me ata.  ¿Dónde estás? hinojo mío, ámame, ya es hora. 

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS