La corrupción y el desarrollo: Una mirada Aristotélica y Kantiana

La corrupción y el desarrollo: Una mirada Aristotélica y Kantiana

Pontificia Universidad Católica del Perú Curso: Ética y Gerencia Social

Profesor: Cesar Inca Mendoza Loyola Alumna: Rocío del Pilar Núñez Delgado

16 de febrero 2024

La corrupción y el desarrollo: Una mirada Aristotélica y Kantiana

La corrupción, amenaza la democracia, la estabilidad, la seguridad de las sociedades; compromete el desarrollo sostenible, económico, político; la corrupción tiene vínculos, es delincuencia organizada, tiene una característica de ser transnacionalizada, por transferencias de activos ilegales. La corrupción es un obstáculo para el crecimiento del país, obstruye el estado de derecho1.

La corrupción obstaculiza el desarrollo a nivel mundial, se calcula un billón de dólares anuales en pago de sobornos; el robo de 2,6 millones de dólares anuales por corrupción que es cerca del 5% del producto interior bruto mundial (UNODC, 2018).

La corrupción menoscaba democracia, gobernanza, derechos humanos en poblaciones mas vulnerables como pueblos indígenas y mujeres

La corrupción, es un ejemplo de la ambivalencia de la ética, que es, como una persona concibe la ética y por otro lado cómo es su conducta, es decir como la vive, la practica (Giusti, 2008); en este caso vemos una contradicción, las autoridades, cuando postulan a cargos de poder dejan entender que los preceptos de la ética conducirán su actuar, pero cuando llegan ganan elecciones su comportamiento es diferente, cometen actos de corrupción, esta conducta genera perjuicio en minorías, pobres sin importar las consecuencias de su comportamiento.

La corrupción repercute en la pobreza con consecuencias devastadoras por el sobornos, distorsiona el fin de las políticas públicas para construir carreteras, servicios básicos, escuelas; en salud, afecta a pobres por cobro de tarifas no consensuadas, arbitrarias, que degenera en sobornos; influye en dinero destinado a efectos del cambio climático utilizado para beneficios personales con exclusión de comunidades indígenas; en educación, roban recursos destinados a construcción de escuelas, que resultan con infraestructura deficiente, cobro de tarifas educacionales, que obliga al abandono de educación sobre todo de las niñas1.

No se cumple en este caso, el paradigma de la ética de la autonomía de Kant, que proclama una sociedad justa para todos, con imparcialidad, sin iniciativas egoístas, llegando a una conciliación, con reglas de convivencia, principios, con respeto a la dignidad de todos, con decisiones racionales, universales, con la construcción de reglas para una adecuada coexistencia y libertad (Giusti, 2008).

Aristóteles también habla acerca de la justicia, afirma que la justicia es teleológica, que tiene un propósito, un fin; la justicia no es neutral, la justicia hace honor a la virtud y naturaleza de buena vida, esta justicia discrimina pertinencia indagando el propósito (Sandel, 2012). La corrupción trae consigo un juego de contratos lucrativos, con ello soborno, fraude y malversación, perpetuando el subdesarrollo (UNODC, 2018), en donde no se pone en práctica la justicia.

El impacto de la corrupción en el desarrollo se puede cuantificar en forma directa por el pago uso inadecuado de recursos públicos en programas sociales que se pierden por intermediarios y los costos indirectos, no se cuantifican adecuadamente, disminuyen la productividad de capital por empresas, pobre inversión. De mayor a menor procesos donde se evidencia más corrupción, tenemos: Pagos por tramites de servicios públicos, contacto con autoridades; contacto con autoridades de seguridad pública; tramites vehiculares; tramites en educación pública; tenencia o propiedad vehicular; en registro civil1.

Es un claro ejemplo de la trasgresión de las afirmaciones de Kant, donde el valor moral, es el motivo de hacer lo debido y esto implica el deber, lo que se debe hacer, y no hacerlo por una inclinación, vemos en el párrafo anterior que la corrupción es un acto egoísta que no cumple el principio supremo de moralidad, conectando la moral con la razón y la libertad (Giusti, 2008); el actuar de las personas corruptas tienen conductas para aplacar sus fines personales, su motivación es el bienestar personal a costa del sufrimiento y perjuicio y hasta el desenlace fatal de una persona en condiciones de vulnerabilidad.

A nivel internacional, la corrupción genera dificultades para hacer negocios adecuados, por la delincuencia, ineficiencia gubernamental, la burocracia; impide inversiones adecuadas debido a que generan costos adicionales, o impuestos sobre las utilidades, que generan perdidas para las empresas que quieren negociar1.

En este sentido, no se cumple el actuar libre, el actuar autónomo de Kant, donde uno toma decisiones que vienen de uno mismo y no por intereses, donde los recursos públicos son un fin personal, sin respetar la dignidad humana que genera idea de libertad, idea de moral (Giusti, 2008).

La corrupción se ve reflejada en la política, por la crisis en la democracia, la desconfianza en los ciudadanos en sus autoridades, debido a que son corruptos, a que no cumplen lo que prometen, por que abusan de su posición, solo ven por el beneficio propio, no tienen preparación adecuada para los puestos que ocupan, no apoyan al desarrollo social, no hacen su trabajo.

Aristóteles define a la política se utilizada para un fin, para una vida buena, y está ligada a ser ciudadano, practicándola, el propósito de la política es según manifiesta Aristóteles formar buenos ciudadanos y cultivar buen carácter, cultivar virtud (Sandel, 2012); la corrupción genera crisis, desconfianza, no se cumple adecuadamente el propósito de la política sin el ejercicio de la ciudadanía en forma concreta.

Esta desconfianza institucional, genera un impacto en el desarrollo, debido a que obstaculiza intercambio económico, que genera dilatación en los tiempos para trámites, e incapacidad para actividades documentarias, con falta de control sobre el desempeño institucional; incumplimiento de normas y leyes que repercute negativamente en decisiones para la inversión local y extranjera; las instituciones en las que menos confían son la policía, partidos políticos, sindicatos, presidente de república, gobernadores locales.

En Perú, según el Barómetro de las Américas (Latín American Public Opinion Project); un 36% de la población cree que el principal problema es la corrupción en el Perú, que está por encima de la economía, de la seguridad, de la inestabilidad política; lo mismo señala el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI); la corrupción con un 60.6% por encima de la delincuencia desde 2017 al 2020 (4,5); y según la World Justice Project, la ausencia de corrupción en los poderes públicos esta: En el Poder Ejecutivo (0.40 a 0.37), Poder Judicial (0.41 a 0.44), Poder Legislativo (0.16 a 0.13) (IDEHPUCP, 2021).

El INEI, con respecto al ministerio judicial, manifiesta que los ciudadanos peruanos en un 73.1% no confía en el Ministerio Publico, 82.3% desconfía del Poder Judicial, hay desconfianza en la Procuraduría Anticorrupción en el 72.1% y en la Comisión de Alto nivel Anticorrupción no confían en un 67.4% en el 2020 (IDEHPUCP, 2021).

Referencias

IDEHPUCP Equipo anticorrupción (2021, 2 de febrero). La percepción de la corrupción en el Perú en los últimos años. Idehpucp. https://idehpucp.pucp.edu.pe/analisis1/la-percepcion-de-la-corrupcion-en-el-peru-en-los-ultimos-anos/

Cómo la corrupción afecta al desarrollo.

https://anticorrupcionmx.org/historico/archivo/biblioteca/FactSheet_4.pdf

GIUSTI, Miguel 2008 Introducción: “El sentido de la ética”. En GIUSTI, Miguel y Fidel TUBINO (editores). Debates de la ética contemporánea (pp. 13-42). Pontificia Universidad Católica del Perú / Estudios Generales Letras.

http://textos.pucp.edu.pe/pdf/1705.pdf

Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (2018, 27 de diciembre. La corrupción y el desarrollo. UNODC. chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/http://www.anticorruptionday.org/documents/actagainstcorruption/print/corr18_fs_DEVELOPMENT_es.pdf

SANDEL, Michael 2012 8. “¿Qué se merece cada cual? Aristóteles”. Justicia. ¿Hacemos lo que debemos? pp. (209-235) Traducción de Juan Pedro Campos Gómez. Barcelona: Debolsillo.

SANDEL, Michael 2012 5. “Lo que cuenta es el motivo. Immanuel Kant”. Justicia. ¿Hacemos lo que debemos? (pp. 121-160). Traducción de Juan Pedro Campos Gómez. Barcelona: Debolsillo

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