Esta esperanza, es tuya como mía, nace del infierno de los anhelos, amor de incienso y cal. Entierrame un ojo en la pared para ver nacer a los ciegos del alma. Dame corazón para ver la vida, que no tengo amor en este momento, las horas se beben, se desangran. Es hora de partir a la tumba del horizonte, esperanza eres mia por qué mi padre me quiso, desde que llore mi primer lágrima.
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