Casual historia de un Huraño

Hoy empieza el día, me levanto, me baño, y me alisto para ir a centro de estudio; soy un estudiante de 3 año universitario, estudio para ser oficinista, no es porque quiera, sino que era la única carrera que te da una vida conformista; pensé que la vida universitaria iba ser alegre, pero me di cuenta que sí no tienes contactos es difícil sobrevivir.

Los profesores tienen sus favoritos, los alumnos extrovertidos no respetan normas, las chicas buscan la atracción, los superiores son interesados, y las aulas separadas por grupos. En todo esto es difícil sobrevivir para un introvertido como yo, tengo que rogar para que me acepten en un grupo, tengo que hacer recados para que me hagan caso y tengo que forzarme a ser educado con los que me juzgan.

Antes de ingresar a la universidad era todo distinto, tenia amigos tenia amigas que me querían, tenia amistades con mis superiores y podía hablar con quien quiera, pues antes era un chico normal como quien dice.

Pero ahora todo cambio, solo por una situación que me destrozo en muchas formas. Y es que al momento estoy sufriendo por una infección en el rostro; por esto fue que todo se perdio, lo amigos se alejaron, mis amistades se rompieron y mis amigas se fueron por un futuro mejor.

El primer año no tuve mucha interaccion con los compañeros, hubo expectativas por parte de todos, donde podia entrar cualquier idea, opinion y actitudes divertidas, menos yo, que no tenia opcion pues me espere a mejorar, y tan solo me reclui en mi mismo; nose como pude pasar los cursos y tareas grupales, asi que digamos que fue una salvacion para mi.

Para el segundo año crei haber mejorado, pero fue peor, mi rostro se quedo inerte, no tenia consistencia y forma, solo estaba en nada, eso causo un bajon en mi autoestima, mis compañeros progresaban e conseguian lo que querian. Todo el año fue infernal, fue desastrozo y complicado. 

Decidi cambiar mi forma de vida, asi que decidi en tiempo de vacaciones, hacer lo que decia lo expertos en cuerpo definido, empezar por hacer ejercicio; corrí, salte, hize dieta. Para por lo menos mejorar mi estado fisico y mental, y sentirme bien. 

De un tiempo mejoré, mi rostro ya no lo veia como antes, ahora solo veia alguien con caracter y muy buena pinta, con un cuerpo no definido, pero con masa muscular; y una actitud que hubieran envidiado mis personalidades anteriores.

Llego los inicios de clases, para otros era algo normal, algo cotidiano, como se dice algo común; pero para mÍ era algo especial ese día, porque los compañeros de 3 años qué estuve con ellos conocerián quien era LUCA  AUSBERTO de la facultad de oficinista.

Entre confiado con la actitud de un general, decidido a enfrentar a cualquiera, que ilusion me hacia hacer amigos, qué ilusión me hacia poder ilusionarme con tener una enamorada, qué ilusión me hacia el vivir aquel compañerismo de universidad.

Mientras caminaba por el aula, nadie volteo a verme, nadie se intereso en mí, nadie pregunto como fue que me hice un cambio; fue un golpe muy dura para mi, pues esperaba que sea diferente; pero no me desanime, segui caminando hasta llegar a mi asiento, y planeé mi primer paso que era «hablar con alguien»; quice hablar con mi compañero de al frente; pero este atino a agarrar su celular e ignorarme. 

Quice hablar con la compañera que estaba dos asientos adelante, pero solo sé levantó y se fue con sus amigas; talvez no era mi dia. Al dia siguiente volvi a empezar; pero igual era la cosa. 

Asi empezaron a llegar  los dias y semanas, que se hizo poco a poco mas complicado. Hasta que llego mi equivocacion y casual encuentro……