Prestar la penumbra

Me gustaria llorar un par de rios

A expensas de otra de persona

No deshidratarme yo, sino tomar prestadas sus lagrimas

Robarme sus cuencas, construir un pequeño canal

De mi corazon al suyo,

Y que todos los lugubres sentimientos que vienen con cada gota

Se manifiesten en su cuerpo ajeno

Hacer posible que la purga de minerales

Que viene con cada sollozo

Sea sufrida en carne y ojos por las manos de su majestad

Apretar en cada aureola de senos ajenos, las congojas que guarda mi despensa

Lata por lata, abarrote por abarrote

Menstruar el dolor en otro vientre que no sea el mio

Quisiera hacer que la barrida de lamentos

Y Los coros gregorianos de mi derrota

Sean compartidos en doble intensidad

Por la hoja marchita que cae del arbol

O la voraz velocidad de la zebra,

Y que mi dolor, esbelto e inadmisible

Baje lentamente por el cuello de las jirafas

Hasta hacerles sentir con empatia

Este dolor tan alto como sus pescuezos de atalaya

Tambien incluria en mi jornada de lloriqueos

A los mas sagazes y astutos hechiceros ficticios

Para punirlos con bastones hechoss de angustia y desvelo

Como si palabra sufrimiento fuera un hechizo en forma de circunferencia

Que constantemente baile en sus sombreros punteagudos

Y que al invocar un hechizo, el cielo pueda abuchearlos con una constante lloradera

Que vocalize mi tristeza

Ese es mi planteamiento el dia de hoy. Estoy cansado de sufrir por mi mismo.

De no tener las patas para cabalgar las planicies de este dolor

Hecho de incapacidad y trauma,

Estoy cansado de mi empatia a flor de piel

Y de los derrumbes de mi voluntad ante el dolor ajeno

Y por eso quiero hacer a otros llorar

como forma de viento que les quite el velo

Porque ya no me quedan lagrimas y me vendria bien

Un prestamo de otros ojos que lloren por mi.