-acababa de terminar una relación de 5 años, fue mi primer amor, mi primer todo, lo que toda niña de 15 años anhelaba tener, nos fuimos conociendo, salíamos a demasiados lugares donde van las parejas recién enamoradas, cine, restaurantes, salidas a lugares románticos con velas y globos, el recogía mis cabellos, me peinaba cuando estaba triste, pintaba mis uñas, todos los días hacíamos cartas el uno al otro, diciendo lo mucho que nos amábamos, creo que fue una de las historias bonitas que puedo contar, y como todo al pasar de los años fue cambiando, ya mas maduros, un poco cansados de las cartas y tanto amor, fuimos dejando de hacerlo. en el fondo de mi corazón quería que fuésemos como antes, pero eso no iba a pasar, ya no me apetecía hacer cartas, ya lo habíamos dicho todo, no había nada que decir nuevo, y al cambiar eso permitió que entrara en nuestra vida la monotonía, nos mato en vida, ya no veía los problemas que teníamos cada uno, el empezó a consumir drogas, llevaba 5 meses consumiendo drogas y yo no lo sabia, desconocía el hecho y mas aun la razón, y yo por otro lado empece a volverme mas fría, mas callada, mas mía y cada día menos suya…
-ya sonaba mucho mas los teléfonos móviles en casa, y ya el bloqueo de el móvil era un mal necesario, las salidas a altas horas de la noche era nuestro hobie favorito, escapando silenciosamente el uno del otro.
el arreglarse era como la primera vez. las mismas ganas de vernos bien, el entrenaba mucho para verse mucho mejor, compraba los mejores perfumes, cortaba su cabello muy seguido, la única diferencia de antes es que ahora ya no lo hacia por mi…
finalmente mi corazón no lo quería entender pero ya no había nada entre nosotros, ahora era COSTUMBRE y no AMOR, fue como cuando compras unos zapatos y al inicio los cuidas un montón porque están nuevos, los separas del resto que están ya usados, incluso estos te los quitas con las manos para no dañarlos, pero después de un tiempo ya los usaste ya le sacaste todo lo bueno ya los tiras con los otros usados porque ya tienes otros nuevos que cuidas como antes cuidabas esos… OJO NO HABLO DE ZAPATOS.
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