Monogamia

¿Es la monogamia algo que se puede llevar a cabo o es algo socialmente establecido?
¿Es natural la monogamia teniendo en cuenta que el deseo y el amor van por separado?
En mi opinión, se puede amar a alguien y tener deseo por los demás. También se puede amar a varias personas a la vez.
¿Por qué nos sentimos defraudados cuando nuestra pareja desea a otra persona?
Creo que las parejas monógamas se basan en acuerdos que tarde o temprano terminan siendo incumplidos por el simple hecho de que el deseo juega también un papel importante en nuestra vida.

¿Cuánto tiempo puede reprimirse una persona las ganas de hacer algo? ¿Es saludable reprimir nuestras emociones y sentimientos?
¿Debemos sentirnos mal si deseamos a otras personas estando en pareja? ¿Cómo nos sentimos cuando nuestra pareja desea a alguien más?

¿No sería preferible aceptar que el deseo no está exclusivamente relacionado al amor y generar un diálogo sincero con nuestra pareja?
Sin ofendernos, aceptando, entendiendo y razonando esto como algo normal.
Somos seres humanos con deseos.
Para mí es más dolorosa la mentira, que la infidelidad en sí misma. ¿Por qué no ser sinceros primero con nosotros mismos? Y así después poder ser sinceros con nuestras parejas.
Los índices de infidelidad muestran hoy en día que la monogamia es muy poco probable al largo plazo.

Al engañar a nuestra pareja, también nos estamos engañando a nosotros mismos. No estamos siendo fieles a nosotros mismos. Todo empieza en uno.
No aceptamos el deseo y muchas veces nos culpamos por sentirlo.

Son incontables las veces que negamos nuestras emociones, las reprimimos y luego lo reprimido termina saliendo inconscientemente.

Habría que aceptar que quizás no estamos hechos para estar en relaciones de sólo dos personas, para poder tener diálogos sin miedo a la ruptura, al herir a mi pareja, o a que me hieran. Muchas de estas conversaciones ni siquiera se plantean por el simple hecho de que pensamos que nuestra pareja nos abandonaría si las planteamos.
Esto indudablemente trae como consecuencia el ocultar, y el mentir. Es mejor hacerlo sin decirlo, y ojos que no ven, corazón que no siente.
Pienso al revés. Quiero aceptar que es normal desear a otras personas, y que los demás también deseen. Quiero aceptar que muchas veces no tengo por qué ser suficiente para una persona. Y que es muy probable que yo pueda darle algo diferente a mi pareja, pero que sin embargo el deseo de ella siga latente.
El sexo también es un mundo por explorar. Hay millones de maneras de disfrutar del sexo, de nuestro cuerpo y de esta experiencia humana.
Muchas veces es tabú. No hablamos de sexo. Terminamos sin explorar y sin conocer un mundo lleno de chances, de cosas nuevas por hacer y por probar, por el simple hecho de tener miedo que nuestra pareja nos cambie por alguien mejor que nosotros. Por buscar seguridad. Una seguridad que no existe desde donde se la mire, porque nuestra pareja puede engañarnos por la espalda si no damos chance al diálogo, a que pueda expresar sus emociones para con nosotros sin miedo al abandono.

De cualquier manera, estando en una pareja cerrada o abierta, nuestra pareja puede marcharse en cualquier momento.

Pueden encontrar a alguien mejor que nosotros en cualquier aspecto, porque siempre habrá alguien mejor que nosotros en algo. Y eso está bien. Y eso es normal.
Para finalizar creo que debemos normalizar este tipo de cosas, ya que permitirían un diálogo sincero.

Creo que la comunicación y el respeto son pilares fundamentales en las relaciones de pareja y son estos dos pilares los que con el tiempo terminan derrumbándose por no poder expresarnos acerca de lo que sentimos por miedo al abandono, a lastimar al otro, o a no ser aceptados.

Normalicemos el deseo, seamos sinceros con nosotros mismos, y luego con los demás.