Domingo de primavera, primer domingo de esa estación que antaño tan bien distinguiamos, domingo que comienza distinto, diferente, …donde el cambio de hora se hace sentir, se hace notar, donde las sábanas se pegan más que otro domingo cualquiera, donde el canto de los pájaros no cambia su horario, donde la luna y el sol no entienden de horarios, donde las flores se muestran alegres y coloridas…
9 de la mañana, 8 de ayer…, rayos de sol que penetran por la persiana y atraviesan las cortinas, cual fantasma sin ojos.
Zumo de naranja, café con leche humeante, pan tostado con aceite y tomate…periódico…mientras en los cascos suena Rogers Waters con su canción eterna Money de Dark side of the moon….
Recuerdos de un concierto memorable, único… donde los de nuestra generación nos volvimos más jóvenes tarareando sus letras, donde el tiempo se detuvo en seco, de golpe…sin apenas darnos cuenta, donde los recuerdos de esos viajes de juventud, en coche , con la radio a pleno volumen nos hacia intocables, donde la música era algo más que cuatro notas que se escapaban….
Recuerdos de unos amigos de la niñez…a los que el tiempo los fue alejando y depositando en distintas ciudades, igual que el viento aleja esas hojas secas y las va depositando en lugares increíbles…
Amigos que siempre estarán en nuestra memoria, amigos para siempre….con los que crecimos y maduramos.
Amigos que aunque no están, estaran siempre y para siempre con nosotros, igual que esas hojas secas que viven dispersas…alejadas de ese árbol que las vio crecer y florecer….hasta que el tiempo fue desnudando sus ramas y emprendieron ese viaje hacia otros derroteros…
10,30 de un domingo primaveral, donde el sol se erije reluciente, inmenso, lleno de vida…., donde una ciudad cualquiera va tomando vida, donde las calles comienzan a sentir el calor de la gente, el perfume de esas flores coloridas y llenas de vida, mientras el aire acaricia sus pétalos y expande su perfume por los distintos rincones.
Domingo de un mes que se va, despacio pero con paso firme, último domingo de marzo, primer domingo de primavera…
Marzo que se va, marzo que, cansado y ojeroso, se retira a descansar, a reposar y coger fuerzas para dentro de apenas once meses volver a brillar, mientras abril aguarda callado y expectante su momento de gloria.
Domingo, marzo, primavera, flores, hojas, sol, ciudad…..hora que desaparece….domingo.
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