«Descenso a los infiernos»

Era un espacio viejo tipo sótano con ventanas rotas sin escapatoria y sin uso, baje al hijo le puse en la misma con su padre que se encontraba amordazado y atado de pies y manos.

Até las manos del hijo a la tubería que había pero pensé que no era muy seguro , ya que podía desatarse de alguna manera y hacer lo mismo con su padre.

Lo lleve a un cuarto de estar que había un cómodo diván.

Le ate las manos y los pies a la pata del diván, y le puse un nudo corredizo alrededor del cuello, de modo que si se movía se ahorraría el mismo .

Mientras trabajaba ,puse la navaja encima del diván, de cedro recién barnizado. Todo el sótano olía a barniz.

El diván era un regalo que el había hecho a no se quien, para una hermana no conseguía recordarlo.

Cuando me dirigía a la puerta, el padre tuvo un acceso de tos, así que le puse un cojin debajo de la cabeza y apague la luz.

Le di la navaja a Dick y le dije:

-Acaba con los dos, te sentiras mejor.

Pero aquel hombre atado, tenía la fuerza de diez hombres juntos, se soltó con las manos libres.

A Dick le entró pánico…..Quería largarse de allí, pero no podía, el precio era muy alto por la cabeza de ese hombre secuestrado.

No deje irse a Dick, le dije que enfocará con la linterna y mientras lo hacía yo cogí la escopeta y apunté….. el sótano explotó, todo se incendió……

!Jesús, nunca comprenderé como no oyeron el tiro a treinta kilómetros a la redonda.

Mis piernas empezaron a flaquear cuando conseguí salir del sótano incendiado, me eche ñas manos a la cabeza preguntándome que había hecho……Dick me gritaba:

– Steven como lo has permitido? Se podría haber hecho de otra manera….. mirando inmóvil a los cadáveres allí tumbados .

Sentía arcadas retumbando en mi garganta, jamás había matado a nadie, solo eran secuestros,,nada más, salí corriendo hacia un jardín y vomité en un ciprés viejo, ese que me daba sombra cuando era pequeño.

El descenso a los infiernos empezó ese día para los dos…….