Cuando vas tras aquel muro
sin romper el silencio.
Cuando mis frías palabras no toquen tu piel,
y sola te quedes.

Mi voz en mi  ausencia estarán allí para ti.
Yo te observo, desde un lugar
en el que mis ojos el cielo no pueda alcanzar
y durante la noche,
como una rosa deja caer sus alas,
derramara el viento su llanto solo para ti,
y así tu me veras
aun cuando nadie mas lo haga,

Sentirás mi cálida respiración cabalgando en tu espalda,
y frente a tu pálido rostro
hallaras mis labios,
susurrando tu nombre
mientras mis manos aun cruzan por tu pelo.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS