El Tronco humilde (cuento infantil)

El Tronco humilde (cuento infantil)

Había una vez, un tronco que no tenía amigos, y este se sentía muy triste porque no tenía con quien jugar, ya que, no tenía manos para abrazar, pies para caminar o correr. Así que decide dedicar un día libre para buscar algunos animales del bosque que quieran ser su amigo. Llega a la casa del Elefante y le pregunta: ¿ Quieres ser mi amigo?—- el Elefante responde: “NO, no quiero ser tu amigo porque solo sabes rodarte en los charcos de lodos, y además no sabes correr y tirar pelotas”.

El tronco se fue muy triste por los comentarios negativos del Elefante, pero esto no lo detuvo para seguir buscando amigos, así que llega a la casa del León y le pregunta: ¿ Quieres ser mi amigo?—- el León responde: “ ¿por qué querría ser tú amigo?, mírame, soy el animal más grande de la selva, tengo un pelaje muy bonito, y soy demasiado bello para ser tu amigo, y además tú no tienes pies, ni manos para hacer lo que yo te diga… así que, vete. Después de estas palabras negativas, el tronco ya estaba perdiendo la esperanza de conseguir amigos, ya que lo habían rechazado dos veces y esto era algo de mala suerte para él. De igual manera, siguió rodando por todo el bosque hasta conseguirse con el Tigre, y le pregunta: ¿ Tigre, quieres ser mi amigo…? Al escuchar esta pregunta, este se ríe a carcajadas como demostrando una burla ante esta propuesta diciendo: ¿yo ser amigo tuyo?, jajajaja, no puedo ser amigo de un tronco que solamente puede rodar en los charcos de lodos.

Aquel se va rodando muy triste sin esperanza alguna, hasta observar un choza de paja que le pertenecía a una brujita de aquel lugar, en la parte interior había una luz y por la chimenea salían humos de varios colores como si fuera arco-iris, era tanta la curiosidad que este decide golpear la puerta para poder entrar y pedir ayuda para conseguir amigos. Este le pregunta a la brujita: ¿ Tú me puedes cambiar mi aspecto físico?, Y ella responde con unas preguntas: ¿ Qué me darías tu a cambio, me darías tú corazón?, al escuchar esas repuestas temedoras, el tronco le responde: no puedo darte mi corazón porque sin el no puedo vivir. Por consiguiente, este le hace una propuesta más convincente… “ si me haces un barco muy lindo, yo puedo llevarte sobre mí cuando crezca el río inundando por completo la selva, incluso cuando no puedas volar por las fuertes lluvias, yo estaré ahí contigo para ayudarte a cruzar el otro lado del río. “Mmmm interesante propuesta” dijo la brujita, enseguida saca una barita mágica haciendo su hechizo convirtiendo al tronco en un hermoso barco para navegar y este queda maravillado por su nuevo aspecto físico que le da las gracias a la brujita y muy feliz se va a navegar.

Después de un largo y maravilloso día, las lluvias cayeron demasiado fuerte que el río creció e inundo el hábitat de cada animal que vivían en la selva e incluyendo la choza de paja de la brujita. El barco (tronco) fue a socorrer a la brujita y el ayudó a pasar el otro lado del río en donde aún se conservaba seca la naturaleza. Luego de haberla dejado… este barco siguió navegando alegremente, hasta escuchar al Elefante pidiendo ayuda, “ auxilio, auxilio, por favor no me dejen aquí, no sé nadar y tengo miedo, querido barquito, no sé quién eres, llévame sobre ti hasta al otro lado del río por favor.” Con mucha humildad le ayudó a cruzar el río sin decir una palabra.

Mientras seguía navegando en las olas del río, escucha al  León diciendo: “querido barquito, ayúdame por favor a cruzar el río, tengo miedo de perder mi pelaje, llévame sobre ti.” Con mucha humildad le ayudó a cruzar el río sin decir una palabra.

El barco navegaba con mucha felicidad que tarareaba canciones alegres, pero un fuerte rugido del tigre interrumpió su canto pidiendo ayuda “ Auxilio barquito, estoy enredado en las ramas de estos arboles, ayúdame a salir de ellas, y llévame sobre ti hasta el otro lado del río”. Con mucha humildad el barco le ayudó a cruzar el río sin decir una palabra. Después de haber ayudado a cruzar a los animales de la selva y a la brujita, estos se preguntan: ¿ Dónde está el tronco?, el barco al escuchar esa pregunta se ríe a carcajadas diciendo “ soy yo el tronco, aquel que buscaba amigos para jugar, y que ustedes rechazaron porque no tenía manos para abrazar, pies para caminar o correr. Y estos animales le preguntaron ¿ por qué eres un barco y por qué nos ayudaste cuando fuimos malos contigo?, el tronco responde: La brujita me ayudó a ser un barco, ella me convirtió en lo que soy ahora, y los ayudé porque tengo un corazón muy lindo, y porque fue hecho para salvar vidas. Después de escuchar las palabras del barco, los animales le pidieron disculpa al tronco por haberlo rechazado cuando de verdad el necesitaba amigos para compartir sus habilidades, y sus gustos, estos animales prometieron aceptar a las demás tal y como son.

                                                          FIN

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