Este es el primer día de mi recuperación, hoy tomo la decisión de no odiarte, pero también de dejar de amarte. Quizás esto último no sea del todo cierto, porque una de las razones por las que me voy, es para que seas plenamente feliz y si no te amara no buscaría eso para ti. Toma mi decisión como ultimo regalo que puedo darte. Deseo de todo corazón que encuentres la dicha y la plenitud en tu vida, que seas intensamente feliz y que todos tus sueños y proyectos se hagan realidad. Hoy mientras tomaba esta decisión, me di cuenta que en realidad lo que no me dejaba soltarte era el miedo, miedo a estar sola y miedo a que nadie en el mundo me amara, pero también me di cuenta que en realidad tú ya no me amas, así que no tiene caso retener ese sentimiento a la fuerza. Que me dijeras que estás tranquilo y que estar lejos te hace sentir bien, me da la fuerza para desear lo mismo para mi. Ese hueco sigue aquí, muy profundo, muy doloroso, se que vendrán días malos y quizás poco a poco lleguen los buenos,m. Aunque esta separación ya lleva varios días y varios meses, de una larga y dolorosa despedida, hoy es el primer día que decido por fin terminar esa agonía. Te amo tanto, fuiste el amor de mi vida. Pero también me doy cuenta que no es a tu yo actual al que amo, es a tu yo de hace años y esa persona ya no existe. Espero poder contar esta historia en unos años, y recordarla como el agua qué pasa. Adios 

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