Pensamientos desolados de una enamorada complicada 03/08

Estoy muy tensa, excitada y confundida.

Siento amor, dolor, placer y sufrimiento. No se explicarlo. Ahora no siento nada por nadie y de todo por los dos. 

Quiero huir. No empezar nada con uno serio, pero a la vez me muero de ganas.

No dejar al otro, pero eso creo que ya es costumbre, aunque sí, le quiero. 

Claro que le quiero, pero se murió la pasión hace tiempo. Claro que me gusta, pero hemos sufrido mucho por culpa el uno del otro.

Lo siento, lo siento mucho. Parece ser que los hombres son mi perdición…

Al menos ellos dos y uno más lo fue. En unos días siento algo tan intenso como con cualquier otro en meses… Aunque con él fue todo también muy rápido, al principio era vicio y luego amor.

Ahora, ya no siento ese amor, ni por el ni por nadie. Le deseo, pero creo que ya no se lo merece, ni nos merecemos pasar más dolor. 

Puede que de verdad se termine de una vez por todas pronto.

Sospecha, ¿Cómo no va a hacerlo? Si agarro su mano por la calle y le beso, le beso hasta que me pican los labios por su barba cortita. Le abrazo, le toco, voy con él a donde sea.

¿Cómo no va a notarlo si ya casi me voy una vez? ¿Si del alma me sale agarrar su mano por la calle aunque nos vean?

Me tiene loca… El marrón de sus ojos… Como me mira…. Son ese café que necesito para estar despierta.

El olor de su piel, su suavidad…. Lo grandes que son sus manos y joder, el ancho de su espalda.

Una espalda sobre la que me gustaría dormir largo y tendido, contar los lunares en ella y besar cada milímetro.

Un latido acelerado y rítmico cuando le abrazo, que escucharía el resto de mi vida.