Historia cortita de una convivencia especial

Historia cortita de una convivencia especial

Ningen

08/08/2022

En una mediagua vieja. Sin pintar. Sin flores que la adornen. Con techo oxidado. Y un corralito con dos perritos. Vive una pareja. Una gorda de gran peso, y un flaco casi en la desnutrición.

Se conocieron en una de esas aplicaciones. Ella tenía veinticinco y él treinta. En ese tiempo no eran así; ella tan gorda, él tan flaco. Se vieron solo dos veces. Desde antes que se vieran ya se decían te amo. En su primera junta tuvieron su cita, en su segunda se pidieron pololeo, y a los dos meses de relación. Se casaron.

Como era de suponer. El espacio donde convivían es muy reducido, y cuando cocinaban, la casa quedaba pasada, mezclándose con otros olores cercanos. Así que no importaba si comían en la cocina o en la cama. Prefiriendo en primer lugar la cama.

Las peleas entre ellos eran comunes. Era raro que no lo hicieran. La gorda decía que era un flojo que se lo pasaba en la cama «echao». Y el flaco amenazaba con irse si no dejaba de decir tantas insolencias. 

Pero llegando la noche, toda esa dramatización se olvidaba. El dormitorio se convertía en cine. Reían y lloraban juntos. La pelela con orina, y los pañales de adultos tirados, pasaban inadvertidos. Olvidando… cómo vivían. 

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