07/06/2022

Deambulo descalzo

por mi memoria

tras el rastro de la lluvia

hasta el hogar de mi tristeza

Es el hogar que almacena

los desastres del alma;

es lo mejorcito de cada uno,

es la juntanza de esperanzas, sacrificios,

amores desamores y tristezas.

La tristeza no es objeto del despoje

es transparente como un rayo del sol

y es leal a ciertas alegrías.

Nacemos y morimos tristes,

mientras en ese entretiempo,

nos enamoramos de cuerpos

usualmente tristes

en los que la belleza es un milagro.

Descalzos caminamos en peregrinación,

triste es la tristeza de nuestro bordón;

las gotas de nuestro sudor

saben a tristeza triste.

Las huellas de la lluvia

nos regresan al hogar de la tristeza

enamorada, solitaria y clandestina.

Y allí rodeada la tristeza

de tus frágiles dogmas;

de tus resecas lágrimas,

y de un siglo de ensueños;

nos abraza apasionadamente

con un anticipado placer.

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